Localizaban las piezas en el extranjero, las compraban de forma ilícita utilizando identidades falsas y se dedicaban a convertirlas en armas de fuego reales montando y desmontando las armas. La Policía Nacional logró desarticular esta red con base en Sevilla que se agenció de un auténtico arsenal de fusiles de asalto y armas de guerra. RD