Cada vez surgen más iniciativas para proteger al creciente número de peatones que ponen en peligro su integridad física al distraerse con el móvil. Ciudades alemanas, el Estado de Suecia y en España las ciudades de Alcorcón, Talavera de la Reina y Sant Cugat han tomado una variopinta serie de medidas que los expertos en seguridad vial consideran positivas, aunque echan de menos un enfoque más global.
Las administraciones de estos territorios opinan que los estados o incluso la Comisión Europea deberían marcar el camino a seguir para abordar un fenómeno que de tan extendido ya tiene incluso nombre: son los smombies (de smartphone y zombis).
En España, ni las administraciones ni ninguna organización privada han estudiado el fenómeno. En los datos oficiales de atropello de peatones no figura la causa. Los únicos puntos de referencia figuran en un estudio llevado a cabo en EEUU y publicado por el British Medical Journal. Esta publicación científica reveló que en los países desarrollados el 20% de los atropellos están causados por despistes de los peatones, que en el 98% de los casos iban utilizando su smartphone.
Después de analizar los comportamientos de más de 1.000 peatones en el momento de cruzar una calle en una ciudad de Estados Unidos, los mismos investigadores detectaron que uno de cada tres estaban distraídos con su móvil: un 11% escuchaban música, un 6% hablaban y un 7% escribían mensajes. Esta última actividad se reveló como la más peligrosa en las calles de la ciudad sometida al estudio. Sus protagonistas eran casi cuatro veces más propensos a ignorar las señales, a cruzar por el medio de la calzada o a dejar de mirar a ambos lados antes de bajarse de la acera que el resto de los viandantes. El estudio data del 2013.
El ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) se ha inspirado en las ciudades alemanas de Augsburgo y Colonia para instalar su semáforo en el suelo. En estas urbes alemanas, la fila de luces rojas está situada junto a las paradas de tranvía y se encienden al mismo tiempo que lo hace la del semáforo.
PUBLICITARIO ACCIDENTADO // La iniciativa de Suecia ni siquiera surgió de la Administración. Fue Jacob Sempler, un publicista que sufrió un atropello mientras tecleaba un mensaje en el móvil, a quien se le ocurrió diseñar una señal triangular de peligro con dos personas mirando el móvil en su interior. Después de fabricarla y colgarla por su cuenta en varias calles. Actualmente, la señal está incluida en el Código de Circulación sueco y se instala en aquellos cruces donde existe más riesgo de despiste tecnológico.
El municipio madrileño de Alcorcón ha optado por una solución que a la larga quizás sea la que tenga más futuro a la hora de proteger la seguridad de los transeúntes. Si es el móvil el que distrae al peatón, avisémosle a través del móvil, pensaron los responsables municipales. Dicho y hecho. La consultora tecnológica SrBurns ha creado un aplicación, Cebrapp, que avisa cuando el peatón se acerca a un cruce regulado por un semáforo.
La iniciativa más económica y, por lo tanto, más fácil de aplicar son los mensajes de advertencia que ya han pintado en los pasos cebra de las calzadas de Talavera de la Reina (Toledo). H
