El futuro pinta regular para las pensiones. El peso de la población mayor de 65 años es cada vez más alto, la esperanza de vida también va al alza y la natalidad está bajo mínimos. Y la economía no ayuda en nada. Pese a la recuperación del empleo, que existe, las cotizaciones de los nuevos trabajadores no resultan suficientes como para diluir este cóctel explosivo. ¿La conclusión? Al 86% de los asalariados de Castellón le preocupa, y mucho, el futuro del sistema de pensiones, aunque lo curioso es que la mayoría sigue confiando en que la prestación pública será su principal fuente de ingresos cuando deje de trabajar. Quienes no se fían y ahorran son todavía una minoría, el 45%.
Pese a que la llamada hucha de las pensiones tiene desde este mes 9.500 millones de euros menos (la cantidad dispuesta por la Seguridad Social para abonar las dos pagas de diciembre, la extra y la ordinaria, a los jubilados) y el Gobierno prevé que la reserva se agote el próximo año, las pensiones están garantizadas. Otra cosa, y muy diferente, es que quienes se jubilen dentro de unos años percibirán hasta un 40% menos que los pensionistas de ahora. Hoy, cuando una persona se jubila percibe entre un 75 y un 80% del sueldo que venía percibiendo. No obstante, la Comisión Europea ha echado sus propias cuentas y augura que en el 2035 esa proporción bajará al 58% y a menos de la mitad (48%) en 2060. La solución, para mantener el poder adquisitivo, pasa obligatoriamente por ahorrar desde ya. No hay muchos secretos más.
En Castellón reina el pesimismo y el 43% de los ciudadanos cree que vivirá con aprietos una vez se retire del mercado laboral (datos del informe Las pensiones y los hábitos de ahorro en España, del instituto BBVA). No obstante y pese a que un alto porcentaje de la población es consciente del futuro que le espera, el 55% no ahorra para su jubilación. Quienes no lo hacen aseguran que o, bien no pueden o bien se consideran todavía jóvenes como para pensar en el retiro.
PLANES DE PENSIONES A LA BAJA // La mayoría de los trabajadores no planifica su jubilación y quienes sí lo hacen en Castellón confían mayoritariamente en los planes de pensiones. De hecho, son la opción elegida por seis de cada diez personas que en las provincia ahorran para la jubilación. Pero lo cierto es que en vez de ganar adeptos, los pierden y eso que cada vez son más los mensajes que aconsejan al trabajador, tenga la edad que tenga, que empiece a guardar dinero para el retiro.
En Castellón, solo el 15,5% de la población tiene suscrito un plan de pensiones, según los últimos datos que dispone la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco), un 1,1% menos que el año pasado. En total, son 90.246 los partícipes, con un patrimonio de 690,5 millones de euros. Hace un año eran 97.740. O dicho de una manera más clara: en un año, los planes de pensiones han perdido en la provincia casi 7.500 partícipes.
Los planes de pensiones no cuajan (en España, en cambio, se mantienen con 7,8 millones de partícipes y un patrimonio de 68.000 millones de euros) y la explicación hay que achacarla a la liquidez, es decir, al hecho de que el ahorrador no puede retirar el dinero hasta que se jubile o, desde el 2015, hasta pasados 10 años desde la primera aportación. Esa es uno de los grandes problemas de esta fórmula de ahorro y, quizás, la clave de su escasa penetración en Castellón. Y todo eso pese a que los expertos insisten en la necesidad de darles un impulso a base de incentivos públicos (leáse bonificaciones) y planes de pensiones de empresa, muy minoritarios aún en Castellón.
MANDAN LOS FONDOS DE INVERSIÓN // Hay menos ahorradores con planes de pensiones pero también más con fondos de inversión. En la provincia, y siempre según datos de Inverco, son 66.487 los ahorradores que tienen su dinero en un fondo de inversión. Eso significa que el 11,5% de la población de Castellón es partícipe en algún fondo tanto de renta fija, como mixta o variable. Lo llamativo es que el peso de este producto no deja de crecer y solo en el último año ha ganado 10.385 adeptos, desde los 56.102 del 2014 a los casi 66.500 al cierre del pasado ejercicio. El patrimonio total en estos fondos asciende a 1.542 millones de euros, 147 millones más que a final del 2014.
