Hoy quiero aprovechar esta tribuna para lamentar la actitud que los partidos de la oposición. Lo vemos en el Ayuntamiento de Castelló, con una derecha, que, por acción o por omisión, está causando perplejidad.

La oposición es una oportunidad que tienen los partidos para plantear su alternativa a la gestión de los gobiernos de turno, en este caso el municipal. Pero la lástima es que los conservadores entiendan cuál es su papel para mejorar la ciudad y apuesten por la vía de la crispación.

Viene a cuento estos por las declaraciones tremendistas de los representantes del PP y Ciudadanos, sobre todo los primeros, que ponen de manifiesto que la línea que han escogido es la de seguir mintiendo a la ciudadanía, atacando a la alcaldesa y poniendo palos en las ruedas.

En el poco tiempo que llevamos de curso político, tras la constitución de la corporación, se ha demostrado que la derecha habla sin saber sobre cualquier asunto que pretenda impulsar el gobierno y se lanza a generar confusión y polémica.

Los socialistas ya estamos acostumbrados a la táctica del gato panza arriba de los populares, que parece ser que solo aspiran al arañazo o al mordisco político al ejecutivo. No dice mucho en su favor. Tratan de confundir a la ciudadanía con cualquier argucia, pero ya pocos les creen.

Sería mejor que empezaran a trabajar por Castelló de forma constructiva y a no dejarse llevar por la tentación de titulares de prensa fáciles. Deberían saber que la oposición destructiva que hicieron en los últimos cuatro años fue castigada de forma contundente por la ciudadanía. Las urnas decidieron que el PP no iba a gobernar y tienen que asumir su papel en esta nueva etapa.

*Portavoz socialista en el Ayuntamiento de Castelló