Cobrar a todos por utilizar las autovías. Es la nueva medida recaudatoria propuesta por el ejecutivo de Pedro Sánchez, igual de injusta que la medida que ya han aplicado subiendo los impuestos al diésel o a las bebidas azucaradas, como los zumos o la horchata... Es justo todo lo contrario de lo que debería hacer en estos momentos el Gobierno de España. Pero todos tenemos claro que a la izquierda siempre le interesa recaudar más para poder gastar más, aunque con ello se lleven por delante el bienestar y las oportunidades de millones de personas.

Está claro que el futuro económico de la provincia de Castellón no les importa lo más mínimo. Sólo en las últimas semanas lo han demostrando con el abandono del tratamiento de las plagas en los cítricos, con la reducción de los derechos de los pescadores, y en el ninguneo constante a la cerámica y sus necesidades energéticas… Y ahora quieren rematar la faena con un nuevo castigo al turismo y otro castigo al sector del transporte y al sector logístico, dos de los sectores esenciales y fundamentales para la economía de la provincia de Castellón. Un sector que ha visto encarecer sus costes con la subida de los hidrocarburos, ahora le van a meter otro sablazo por sus recorridos.

Según las previsiones publicadas, nos va a costar sobre unos 60 euros de media al mes a los castellonenses que circulemos por las autovías de la provincia, en un impuesto que no existía. Y para los autónomos que trabajan en la carretera el gasto podría superar los 1.000 euros al mes.

Mientras, los ayuntamientos gobernados por el Partido Popular en la provincia de Castellón están centrados en atraer nuevas inversiones sostenibles a nuestros municipios y promover la recuperación de la actividad económica. Hay algunos partidos políticos que siguen empeñados en hacer todo lo contrario en el resto de las administraciones públicas.

Pero ahí no se queda la cosa… la cerrazón ideológica del PSOE de Sánchez por subir los impuestos no sólo va a perjudicar a la economía. Es una medida que sin lugar a dudas va a obligar a muchas personas y camiones a buscar vías alternativas y más peligrosas, como son las carreteras secundarias, donde se multiplica la probabilidad de sufrir un accidente.

Ofensiva legal, cívica y parlamentaria

Desde el Partido Popular vamos a una auténtica ofensiva legal, cívica y parlamentaria contra este tipo de peajes. Al igual que tuvimos que hacerlo para que se bonificara el peaje de la AP-7 en la provincia de Castellón.

Tenemos que recordar que Rajoy, tras no prorrogar la concesión de las autopistas, contempló en los Presupuestos el dinero necesario para liberar la AP7, votados en contra por el PSOE días antes de la Moción de Censura al Gobierno. Pero tras la Moción, Sánchez y sus socios, solo aplicaron la liberación durante 2018 y 2019 en Cataluña. Esta era la primera vez que un gobierno de España, sin ninguna aportación de una comunidad autónoma, aplicaba una medida discriminatoria y convirtió en frontera lo que siempre había sido un límite provincia.

Al igual que entonces el PSOE de la provincia de Castellón se pone de perfil y no se oponen frontalmente a esta medida tan perjudicial de Sánchez para las personas que vivimos en la provincia de Castellón.

Este es un nuevo sablazo a la provincia de Castellón que entre todos tenemos que parar.

Diputado. Secretario General del Partido Popular de la provincia de Castellón