Llega la Semana Santa y con ella las reuniones sociales que siempre van bien acompañadas de buenas comidas con tradicionales dulces, pero estos siempre son un problema para aquellos que quieren mantener la línea que se han ido ganando durante el curso con esfuerzo y ejercicio. Es por ello, que te ofrecemos una receta para que puedas disfrutar de las tradicionales torrijas pero sin dejar abusar del azúcar.

Se conoce que las torrijas suman un gran número de calorías ya que combinan el azúcar con el aceite a altas temperaturas, pero con los ingredientes sustitutivos que te planteamos en la siguiente receta podrás reducir el número de calorías sin reducir el dulce sabor de las torrijas.

Ingredientes

  • 2 rodajas de pan integral o de espelta (más fibra y más sencillo de digerir)
  • 1 taza de leche de vaca (preferiblemente desnatada) o de soja
  • Un huevo
  • Una cucharada de esencia de vainilla
  • Medio plátano
  • 1 cucharada de pasta de dátil o edulcorante (fuera el azúcar refinado)
  • Cáscara de medio limón
  • Media cucharada de canela molida
  • Medio palito de canela

Elaboración

  1. En primer lugar utilizamos la leche, la rama de canela y la cáscara de limón. La metemos en una pequeña olla y a fuego medio la cocinamos diez minutos. Una vez hayamos superado este tiempo procederemos a colarlo y dejar que se enfríe un poco
  2.  Después incorporamos el plátano, el huevo, la esencia de vainilla, la pasta de dátil/edulcorante y la canela molida. Lo trituramos con la batidora y lo colocamos en un plato hondo
  3. Este es el mejunje en el que bañaremos el pan. Las empapamos por completo para que absorban todo el líquido posible y una vez hecho esto dejamos reposar las rebanadas unos 10 y 15 minutos
  4. Turno de freírlas y, como hemos dicho antes, no con el método de embadurnarlas de aceite. Calentamos un chorrito de aceite de oliva en una sartén antiadherente y cuando esté muy caliente ponemos las torrijas en la plancha y las cocinamos vuelta y vuelta en la sartén.
  5. Una vez estén en la sartén vigila que el huevo quede cuajado y que coja un color dorado la torrija y cuando creamos que están listas, se retiran de la sartén y se coloca un papel absorbente sobre ellas a fin de reducir el aceite.