El Gobierno italiano ha optado por medidas radicales para combatir la epidemia de coronavirus que ya se ha cobrado 107 vidas y suma más de 3.000 infectados. Universidades y escuelas de todo el país cerrarán desde hoy y hasta el 15 de marzo y todas las competiciones deportivas se celebrarán a puerta cerrada hasta el 3 de abril, según un decreto del Ejecutivo.

El cierre de centros de enseñanza ya estaba en vigor desde hace 13 días en las regiones de Emilia Romaña, Lombardía y Véneto, las más afectadas del norte. Ahora se extiende por toda la geografía italiana, desde Génova hasta Sicilia, aunque en algunos lugares la incidencia de la enfermedad es muy escasa.

La decisión era una de las recomendaciones del comité técnico-científico que colabora con el gobierno desde el primer día de la epidemia y fue anunciada ayer por el presidente del Ejecutivo italiano, Giuseppe Conte, que aludió a la «prudencia» como la principal motivación.

El objetivo de las medidas es evitar a toda costa las aglomeraciones de personas, dado que el contagio es más fácil de prevenir en las relaciones de tú a tú, siempre que se sigan las recomendaciones. Por la misma razón se obligará a «llevar a cabo a puerta cerrada todas las competiciones deportivas», según adelantó Conte, algo que también estaba en vigor tan solo en el norte de Italia.

Las manifestaciones públicas, ferias, conciertos han sido cancelados en todo el país. El comité científico también había aconsejado días atrás abstenerse de una costumbre bastante extendida (aunque menos frecuente que, por ejemplo, en España), de saludarse con dos besos en la mejilla, o de darse abrazos. Tampoco se recomienda el apretón de manos. Se pide igualmente evitar los lugares muy concurridos y se establece una «distancia de seguridad» de al menos un metro.

segundo fallecido en españa / La situación es muy distinta en España. No solo por la extensión del coronavirus, sino por los planes del Gobierno. Hasta el cierre de esta edición, se habían contabilizado 227 casos con dos fallecidos. El segundo fue un hombre de 82 años con enfermedades crónicas que murió ayer en Vizcaya de covid-19, la primera muerte que se registra en el País Vasco por esta epidemia y la segunda en el conjunto de España, tras el fallecimiento de un hombre de 69 años en València el pasado día 13. El departamento vasco de Salud informó de que el fallecido tenía neumonía y había dado positivo en coronavirus ayer por la mañana. Euskadi registró, solo ayer, cuatro casos nuevos con lo que se elevan ya a 21.

Esta es la segunda muerte por esta enfermedad que se registra en España tras la confirmación el martes de que un paciente que falleció el pasado 13 de febrero en València y que también sufría una neumonía grave de origen desconocido tras haber viajado a Nepal murió con coronavirus, según se confirmó con una investigación retrospectiva.

TRES MENORES INFECTADOS / Ante la aparición de tres menores infectados en Madrid y en Guadalajara, Sanidad explicó que no considera necesario cerrar los colegios donde se han dado estos casos ni tampoco cree que sea «útil» hacerlo aunque la situación empeorara. Al contrario, podía llegar a ser contraproducente, dio a entender Fernando Simón, coordinador del comité de español de seguimiento del coronavirus.

El primer peligro asociado al contagio de un menor no es para él mismo. «Los niños tienen una evolución clínica mucho más benigna» y «la mortalidad es realmente baja», apuntó Simón. Según sus datos, en China no se ha registrado ningún fallecimiento en menores de 9 años, mientras que en el grupo de 9 a 20 la mortalidad es del 0,2% frente al 2% o 3% de la media de la población.

El principal riesgo es que lo contagien a sus familias y otros mayores. Si se cierran los colegios, es previsible que se movilicen muchos cuidadores (abuelos incluidos) para poder estar con los críos. Es más, según destacó Simón, los niños y las niñas saldrían a la calle, los parques o acudirían a centros comerciales, donde el riesgo de transmisión es mayor que en una escuela.

La Unesco ya ha mostrado su preocupación porque en todo el mundo hay 290 millones de niños que no asisten a clase por la crisis del coronavirus, la mayor parte de ellos en China.

Ninguno de los nuevos datos recibidos hasta ayer lleva al Gobierno a pasar de la fase 1, la de contención, al de mitigación, la misma aplicada en Italia hace dos semanas. Ni siquiera el fallecimiento en València del 13 de febrero. El hombre había viajado a Asia donde presumiblemente adquirió la enfermedad y la investigación abierta sobre sus contactos en España ha arrojado un resultado negativo.

Tampoco preocupa en el ministerio que en esas fechas tan tempranas hubiera habido más casos porque de ser así «ya se hubieran detectado contagiados en las dos semanas siguientes», el periodo de incubación del virus. Solo si se detectara una proliferación descontrolada de casos se tomarían medidas más contundentes. Algo que aún no ha ocurrido.

Simón desaconsejó que personas con algún tipo de síntoma compatible con el coronavirus acudan a la manifestación feminista del próximo 8 de marzo. También pidió a las instituciones eclesiásticas que adopten las lógicas precauciones para evitar que los fieles besen las imágenes en las celebraciones como la del Cristo de Medinaceli. Más información en página 45.