Sanidad

Agresiones, equipos incompletos y renuncias: un año de las urgencias extrahospitalarias de Madrid

El sindicato de médicos denuncia la reforma y habla de "unas urgencias urbanas y rurales dañadas, pese a ser un modelo que funcionaba y que era apreciado y valorado por usuarios y profesionales"

La Consejería de Sanidad dice que las cifras avalan el nuevo modelo: se ha atendido, desde el 27 de octubre de 2022, a casi 700.000 pacientes, el 56% por parte de enfermería

Sanitarios manifestándose frente a la Consejería de Sanidad en Madrid.

Sanitarios manifestándose frente a la Consejería de Sanidad en Madrid. / EP

Nieves Salinas

El nuevo modelo de las urgencias extrahospitalarias que "implantó unilateralmente" la Comunidad de Madrid, se queja AMYTS, cumple un año. El balance que hace este sindicato es de "unas urgencias urbanas y rurales dañadas, pese a ser un sistema que funcionaba (con excepciones, sobre todo en grandes localidades) y que era apreciado y valorado por usuarios y profesionales". La visión de la Consejería de Sanidad es mucho más positiva: los Puntos de Atención Continuada (PAC), precisa Almudena Quinta, Directora General Asistencial, han atendido desde el 27 de octubre de 2022 casi 700.000 pacientes, el 56% por parte de enfermería, lo que "avala el modelo".

El 27 de octubre de 2022 el gobierno madrileño puso en marcha un nuevo modelo de ochenta Puntos de Atención Continuada (PAC), tras el cese de la actividad de los existentes SAR (Servicios de Atención Rural) y los SUAP (Servicios de Urgencias de Atención Primaria). La Consejería de Sanidad decidió reabrir las urgencias urbanas (SUAP) moviendo al personal que "llevaba años trabajando exitosamente en las urgencias rurales (SAR, )", rememora AMYTS. Una decisión que ha dejado muy pocos centros que funcionan de manera similar a antes de la reforma.

Un otoño caliente

Así lo señala AMYTS este viernes. En noviembre de 2022, y en aquel momento de conflicto extremo en el que, a la situación de las urgencias extrahospitalarias -el nuevo modelo arrancó en medio de un enorme caos- se sumaba "la gravísima sobrecarga" que entonces sufrían los médicos de familia de los centros de salud, el sindicato convocó una huelga que convulsaría el otoño madrileño.

Sanidad de Madrid habla de unos dispositivos, que cuentan con 788 profesionales distribuidos en 53 PAC, que "responden absolutamente" a la necesidad del usuario

Doce meses después, el retrato del funcionamiento de esas urgencias extrahospitalarias -que cambiaron de nombre y de dinámica de funcionamiento en distintas ocasiones- varía en función de quien lo dibuje. En declaraciones a los medios, Almudena Quinta, Directora General Asistencial, habla de "un dispositivo más", integrado en Atención Primaria, que cuenta con 788 profesionales distribuidos en 53 PAC con médico, y el resto con personal de enfermería, que "responde absolutamente" a la necesidad del usuario.

"El modelo está funcionando y el resultado ha sido satisfactorio", insiste la responsable de la sanidad madrileña quien ha recordado que la puesta en marcha de los PAC se pactó en la Mesa Sectorial de Sanidad y se hizo después de que un equipo, formado por veinticuatro profesionales, tanto de los antiguos SAR y SUAP como de Atención Primaria, valorara cómo se iba a llevar adelante su reapertura.

"Dolorosa reforma"

El balance que hace AMYTS -que este viernes se ha vuelto a concentrar frente a la sede de la Consejería de Sanidad en la calle Sagasta- es diametralmente opuesto. El sindicato habla de una "dolorosa reforma" y explica que actualmente algún centro rural cuenta con equipo multidisciplinar completo y adecuadamente dimensionado, "en parte gracias a la huelga que protagonizaron estos profesionales y que impulsamos en el sindicato".

Sin embargo, continúan, los antiguos SAR (Arganda, Ciempozuelos Mejorada, Algete, Paracuellos, Navalcarnero o San Martín de Valdeiglesias, citan) y prácticamente todos los antiguos SUAP (Servicios de Urgencias de Atención Primaria) "no tienen una actividad normalizada".

"Terremoto sin precedentes"

La reforma de las urgencias extrahospitalarias provocó "un terremoto sin precedentes con cierre de centros, amortización de sus plazas, reordenación de profesionales, merma de condiciones laborales y asistenciales e incluso la desaparición de más de 250 plazas de médicos, sin olvidar el inicio de la atención sanitaria sin presencia de médico", señala este sindicato. Donde antes había 480 médicos ahora hay 226, precisan.

AMYTS describe una situación de "renuncias, bajas laborales, desmotivación y miedo, aumentando hasta las agresiones a los profesionales como seguimos viendo"

Esto, según AMYTS, "trajo consigo renuncias, bajas laborales, incremento de visitas al PAIPSE (Plan de Atención Integral al Profesional Sanitario Enfermo) y al PAIME (Programa de Atención Integral al Médico Enfermo), desmotivación y miedo, aumentando hasta las agresiones a los profesionales como seguimos viendo". Para este sindicato, la decisión que tomó hace un año la Consejería de Sanidad "ha dejado centros de urgencias rurales y urbanos sin una correcta dotación: o no tienen directamente médico o los profesionales sufren una tremenda sobrecarga asistencial derivada de atender a población de otros municipios".

Recuperar la normalidad

El sindicato de médicos sigue reclamando lo mismo que al conocer la reforma y, señala, está en contacto con la Gerencia de Atención Primaria "con el fin de recuperar la normalidad laboral y asistencial de los SAR/SUAP -actuales PAC-; definir el marco funcional, organizativo y normativo de estos centros para acabar con la inseguridad existente; contar en todos los dispositivos con un número óptimo de profesionales, abriendo exclusivamente aquellos que cuenten con un equipo completo; y consensuar un verdadero proyecto integral de Urgencias y Emergencias para la Comunidad de Madrid". 

Entre un 25 % y un 35 % de los Puntos de Atención Continuada que deberían tener médico, habitualmente no cuentan con un facultativo, denuncia CCOO

Por su parte, en declaraciones a EFE, el portavoz de CCOO Sanidad Madrid, Sergio Fernández, recuerda que el plan supuso el cese de la actividad de los Servicios de Atención Rural, que estaban en funcionamiento, y de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria, que llevaban cerrados desde marzo de 2020. Precisa que entre un 25% y un 35% de los Puntos de Atención Continuada que deberían tener médico, habitualmente no cuentan con un facultativo, por lo que la población acude a las urgencias de los hospitales, lo que provoca la "saturación" de estos servicios, con "picos" asistenciales en verano y en invierno.