Seguridad

La cocaína nazi: por qué la esvástica aparece en la droga incautada en España a los cárteles del narcotráfico

El uso de la esvástica y de otro tipo de marcas, como de coches o de ropa, sirven para marcar a qué organización criminal va dirigida el alijo

Policías muestran el pasado 25 de agosto en Algeciras paquetes de cocaína con la esvástica y la palabra "Hitler" grabada tras la mayor operación contra el narcotráfico en nuestro país.

Policías muestran el pasado 25 de agosto en Algeciras paquetes de cocaína con la esvástica y la palabra "Hitler" grabada tras la mayor operación contra el narcotráfico en nuestro país. / EFE

David López Frías / Roberto Bécares

El 21 de marzo de 2022, F., de 55 años y nacionalidad colombiana, circulaba con un Citröen Picasso por la Glorieta Plaza Fuente de Goya de Getafe cuando la Policía Nacional la interceptó. F. llevaba meses siendo investigada, con pinchazos telefónicos y seguimientos policiales. Los investigadores sabían lo que hacían. En un habitáculo oculto del vehículo, lo que se conoce en el argot policial como "caleta", la mujer, con antecedentes penales por tráfico de drogas, llevaba ocho paquetes envueltos en plástico y cargados de una sustancia compacta de color blanco que resultó ser cocaína de una alta riqueza, el 81,2%. 

Fruto de esta intervención, ese mismo día, los agentes registraron en la capital otro vehículo usado por un socio de F., A., de 42 años y también de nacionalidad colombiana, pero sin antecedentes penales. En otra 'caleta' del coche la Policía se incautó de 38 paquetes -conocidos comunmente como 'ladrillos'-, también de alta pureza. 

En total, los agentes requisaron ese día en los dos registros 35,6 kilos puros de cocaína que en el mercado tendrían un valor de casi 1,8 millones de euros, según recoge la reciente sentencia de la Audiencia Provincial que condena a ambos a penas de entre seis y siete años y seis meses de prisión por un delito "contra la salud pública de sustancias que causan grave daño a la salud".  

A priori, se trataba de una operación más contra el narcotráfico, pero con una salvedad, la de que muchos de los paquetes incautados tenían grabados bien visibles una esvástica nazi. El resto, tenían escrita la palabra "Maybach", un fabricante alemán de vehículos de lujo, filial del prestigioso Grupo alemán Mercedes-Benz. 

El mayor alijo

El pasado 25 de agosto, a 600 kilómetros de Madrid, decenas de periodistas acudían a una convocatoria de prensa de la Policía Nacional. Los agentes, en colaboración con funcionarios del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, habían aprehendido en el puerto de Algeciras el mayor alijo de cocaína en España hasta la fecha. Un hito. El gran golpe al narcotráfico hasta ahora. Se intervinieron casi 9,5 toneladas de sustancia estupefaciente que habían sido transportados en un contenedor marítimo refrigerado desde Machala (Ecuador). 

La droga, también empaquetada en 'ladrillos', viajaba oculta en el interior de 1080 cajas de bananas. En el cargamento ilícito aprehendido por los investigadores de la llamada Operación Nano, dirigida por la UDYCO central con el apoyo de la Fiscalía Antidroga, se detectaron miles de ladrillos con más de 30 logotipos diferentes. Curiosamente, entre ellos estaba la esvástica, y también algunos tenían grabada la palabra "Hitler". Pero no sólo, había logotipos de marcas de coches, como Chevrolet o BMW, o de marcas de ropa de lujo [algunos tenían la palabra 'Raw' (crudo en inglés)]. 

De acuerdo a los responsables policiales, la organización responsable del envío podía enviar 40 contenedores al mes a Europa y "disponía de una amplia red comercial para el envío de contenedores desde Ecuador a España", utilizando también el puerto de Vigo, en el noroeste de España. Es decir, esta operación es solo la punta del iceberg. 

¿Pero por qué los paquetes llevan la esvástica grabada? ¿Qué significa? De acuerdo a los agentes especializados en narcotráfico cada logotipo, cada marca, se corresponde con una organización criminal distinta de Europa que iba a recibir el alijo. Y es que el envío conjunto de droga para varias organizaciones, como si fuera una cooperativa, permite reducir costes y riesgos a los principales distribuidores. "Es algo muy habitual", señalan fuentes policiales. 

Sobre todo en los últimos tiempos. El pasado 25 de mayo, la policía antidrogas de Perú incautó 58 kilos de cocaína que estaban preparados en una pequeña ciudad costera al norte de Paita también en paquetes con la esvástica nazi y el nombre de Hitler grabado.