sucedió en el 2019

Un pacto deja en dos años la pena por una violación en Magdalena

El agresor obligó a la menor a hacerle una felación y la penetró entre lloros

Cientos de jóvenes se divierten en las fiestas de la Magdalena en imagen de archivo.

Cientos de jóvenes se divierten en las fiestas de la Magdalena en imagen de archivo. / MEDITERRÁNEO

La violación a una menor de edad en el marco de las fiestas de la Magdalena se queda en una condena de dos años tras un pacto entre la Fiscalía, la acusación particular y la defensa. Pese a que el delito cometido es el de agresión sexual con penetración y que la víctima tenía 17 años, es más que probable que el sentenciado ni siquiera vaya a la cárcel al carecer de antecedentes previos a estos hechos y al haber consignado antes de la celebración del juicio la indemnización --6.000 euros--.

Se declara probado que el procesado, sobre las 23.00 horas del día 26 de marzo del 2019, durante las fiestas fundacionales de Castelló, se hallaba en la carpa sita en la Plaza de España, donde se encontró con la víctima, de 17 años.

Ambos eentablaron una conversación al conocerse por haber hablando ambos en alguna ocasión previamente. En un momento dado, el condenado le dijo si podían ir a un sitio más tranquilo, accediendo ella y empezando ambos a callejear hasta que llegaron a un descampado. El agresor la condujo hacia el interior, llevándola del brazo hasta una pared donde él se bajó los pantalones y, presionando sobre los hombros de la menor la obligó a hacerle una felación, pese a su negativa.

Él la mantuvo agachada, haciendo fuerza sobre los hombros para que no se pudiese levantar, apartando ella la cabeza, si bien el procesado se la cogió nuevamente por detrás con una mano y con la otra introdujo su pene en la boca de ella, pese a que ella se negaba.

Los hechos

A continuación, tal y como reza la sentencia, el procesado «giró a la menor y la agachó, colocándola de espaldas a él y contra la pared, le bajó los pantalones y la ropa interior y la penetró durante varios minutos, pese a la negativa de la víctima , quien le manifestaba llorando que no quería, que parara y que se quería ir, negándose a ello el acusado». 

Más tarde, volvió a insistir a la adolescente en que le hiciera una felación, a lo que ella se negó, llorando. Ante la insistencia de ella de abandonar el descampado, el procesado acabó accediendo, regresando ambos hasta la carpa de la plaza de España.

Como consecuencia de los hechos descritos, la chica sufrió lesiones a nivel extragenital y en región anterior de flexura de codo izquierdo. 

Además de los dos años de cárcel, la Audiencia Provincial le a impuesto al varón la prohibición de aproximación a menos de 300 metros de la afectada durante un periodo de siete años.

Asimismo, habrá seis años más de libertad vigilada, que consistirán en la participación del agresor en programas formativos de educación sexual.