El antiguo edificio del colegio Embajador Beltrán, de 1961, pasa ya a ser escombros después de que las máquinas de la empresa Añil Servicios, Ingeniería y Obras hayan entrado al recinto para demoler el complejo y dejar el espacio libre para las pistas deportivas. La firma calcula que esta semana concluirá la demolición, circunstancia que permite en estos momentos el retranqueo de las vallas para el paso de peatones por la zona.