El veneno que mató a un centenar de palomas en la plaza Doctor Marañón el pasado miércoles es un producto fosforado tremendamente peligroso y de una eficacia letal, según se desprende de los análisis realizados por la Conselleria de Agricultura a petición del Ayuntamiento de Castellón.

Se trata de un compuesto que contiene gas sarín --utilizado en guerras biológicas--, que resulta peligroso tanto para las aves como para las personas en el caso de que se acceda a él por inhalación, ingestión o por contacto, por lo que desde el consistorio de la capital de La Plana han mostrado su preocupación. Incluso puede provocar la muerte de las personas en 15 minutos si se toma en grandes cantidades.

Según ha podido saber este periódico, el producto con el que se envenenó a las aves no es fácil de conseguir en el mercado y para su adquisición, el vendedor necesita una autorización. Normalmente se utiliza para desinfectar suelos.

Los hechos ocurrieron la pasada semana cuando a primera hora de la mañana, unos vecinos alertaron a la Policía Local de que multitud de palomas habían aparecido muertas en la plaza Doctor Marañón tras haber ingerido un polvo mezclado con su comida habitual --maiz--. Las aves murieron de forma inmediata e incluso caían al suelo en pleno vuelo, según los vecinos que presenciaron la dantesca imagen.

PROSIGUE LA INVESTIGACIÓN

Por su parte, la Policía Local prosigue con las investigaciones con el fin de detener al autor de la matanza. El responsable de la concejalía de Seguridad Ciudadana, Carlos Tovar, ordenó la vigilancia exhaustiva, por parte de agentes vestidos de paisano, en las zonas de Castellón donde existe una mayor presencia de estas aves. El objetivo de esta medida es identificar al presunto agresor para imponerle la sanción correspondiente, tal y como ya publicó este diario.

Según declaraciones del concejal de Sanidad, Enric Nomdedéu, el autor o autores podrían ser acusados de un delito ecológico o contra la salud pública.