La cantante Rosa López llenó ayer el Teatro Principal de Castellón que colgó el cartel de “completo”. Más de 600 personas disfrutaron de los grandes éxitos de Rosa, que se entregó al máximo en el escenario. Más delgada, más guapa y tan cercana como siempre. Lo hizo por una buena causa: colaborar con Manos Unidas Castellón para ayudar a los más necesitados. Y los castellonenses respondieron en masa a la llamada de la oenegé al ritmo de una de las mejores artistas del momento.

“Me encanta Castellón”, dijo Rosa al llegar al hotel. En esos momentos decenas de fans la esperaban para pedirle autógrafos mientras la triunfita se mostraba cariñosa y agradable con todos. Enseguida se fundió en abrazos con las representantes de Manos Unidas Castellón: Laura Menéndez (la presidenta); Nieves Prieto y Carmen San Gabino.

Poco antes de ensayar explicó a Mediterráneo, desde su camerino, cómo se sentía y lo que significaba para ella actuar por esta causa. “Para mí ayudar a la gente, en los tiempos que corren, es un regalo. Como también es un regalo para mí mi público; a ellos les agradezco que estén ahí”. Y añadió: “Lo que más me gusta es que la gente se divierta, que disfrute conmigo; llevo 12 años compartiendo con ellos muchísimos momentos”.

A las 19.30 horas Rosa salía al escenario. Los aplausos inundaron el Teatro Principal y los gritos de “guapa, guapa” acompañaron el inicio de su espectáculo. Tras una breve reflexión sobre lo que han significado para ella estos 12 años de éxito, la granadina comenzó a cantar uno de sus temas favoritos: Desde la oscuridad. Una canción muy emotiva que ya interpretó en el concurso televisivo Operación Triunfo, en sus inicios, y que ayer causó sensación entre sus fans castellonenses.

El espectáculo, que duró dos horas,finalizó con una explosiva ovación que Rosa agradeció diciendo que espera volver “muchas veces más a Castellón”.

Laura Menéndez, presidenta de Manos Unidas Castellón, detalló que el dinero recaudado en el concierto, unos 80.000 euros, irán destinados íntegramente a un proyecto de formación de mujeres en Karnataka (India). Menéndez agradeció a Rosa su altruista aportación y entrega.

Por su parte la cantante, que se define como una filántropa, abandonó Castellón muy satisfecha y orgullosa. Así, puntualizó: “Espero que mi actitud sirva como ejemplo para que otros muchos artistas españoles apoyen a las oenegés”. H