Los municipios costeros de Castellón ya preparan las actividades de Sant Joan, a la vez que planifican las medidas de seguridad a adoptar con el fin de que esta tradicional fiesta no lleve aparejadas aglomeraciones. Una situación que preocupa, ya que la pandemia sigue presente, y se espera que la mayor parte de los participantes sean jóvenes. Precisamente el grupo de edad que todavía no ha sido citado para vacunarse contra el coronavirus.
La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, ha presidido este lunes en el Palau del Temple de València la reunión de coordinación del dispositivo de seguridad de la noche de San Juan. La Delegación ha acordado desplegar más de 3.000 efectivos de la Guardia Civil y la Policía Nacional en el litoral de la Comunitat Valenciana para evitar aglomeraciones y la celebración de fiestas en las playas. A estos efectivos se suman los agentes de la Policía Local de cada municipio y los efectivos de la Unidad de la Policía Nacional Adscrita a la Comunitat Valenciana.
Recomiendan cerrar las playas
A la reunión ha asistido la consellera de Justicia, Interior y Administración Pública, Gabriela Bravo; el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel; la Federación Valenciana de Municipios y Provincias (FVMP); los mandos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la Unidad Adscrita en el territorio valenciano; así como las tres subdelegaciones del Gobierno en Alicante, Castellón y Valencia.
Durante el encuentro, los asistentes han acordado remitir una circular a los ayuntamientos, a través de la FVMP, recordando que se deben tomar las medidas adecuadas orientadas al cierre de las playas y otros espacios tradicionales de celebración durante la noche de San Juan. Se trata de una recomendación, ya que ya no hay un estado de alarma que dé la plena cobertura legal a la medida, pero en el seno de la FVMP ya se acordó esta decisión. En último término, son los responsables municipales los que tienen la última palabra. Sea como fuere, se instará a los municipios a que realicen una labor pedagógica con la ciudadanía haciendo un llamamiento a la responsabilidad, precaución y cautela.
La consellera Bravo ha recordado que, tras el final del estado de alarma "no hay medidas que afecten a derechos fundamentales", por lo que puede haber reuniones en la calle por parte de grupos diferentes. "Ahora bien -ha puntualizado- lo que está prohibido son los botellones, no solo por la legislación autonómica, sino también por las ordenanzas municipales que han estado y están vigentes antes, durante y después de la pandemia".
Llamada a la precaución
“La Delegación ha convocado esta reunión para profundizar en la coordinación y preservar la seguridad de la ciudadanía. Es imprescindible que sigamos pensando que el virus está ahí, tenemos que tener mucha precaución y ser responsable para no tirar por tierra el gran trabajo que se ha hecho durante el último año”, ha subrayado la delegada.
Al hilo de esta cuestión, hay convocada una junta local de seguridad en Castelló, donde la seguridad en esta fecha señalada formará parte de los asuntos a tratar. Castelló ya ha anunciado que no permitirán el paso a las playas desde las 20.00 horas del día 23 y hasta las 6.00 horas del 24. Una medida similar a la anunciada en otros puntos como Orpesa, Almassora o Burriana.
En la postura contraria hay localidades como Vinaròs o Nules, que permitirán el paso, pero con el cumplimiento de las medidas de distancia social. En ambos casos, las fuerzas de seguridad dependientes de cada administración serán las encargadas de velar por un desarrollo ordenado de la celebración.
