Tras días de anuncios y polémicas por quién sufragaría el coste, por fin este viernes, entra en vigor la medida que contempla que las farmacias de la provincia de Castellón pueden notificar a la Conselleria de Sanitat los resultados de las pruebas de antígenos positivas realizadas en sus establecimientos. Pero, un fallo técnico, ha supueso un cierto retraso en la puesta en marcha de la medida.

La consellera de Sanitat, Ana Barceló, precisó ayer que la medida "no supondrá ningún coste ni para las personas que se acerquen a someterse al test ni para las farmacias". La adhesión a este programa por parte de las oficinas de farmacia es voluntaria y la Conselleria compensará el coste que supone la validación y registro de casos por parte de las farmacias.

El Gobierno fija el precio máximo de los test de antígenos a 2,94 euros. EFE

Mecanismo

El programa está orientado a las personas que presenten síntomas compatibles con la covid-19. El test se adquirirá en las oficinas de farmacia y el ciudadano se hará la prueba de forma presencial en el establecimiento. Además, el registro de datos personales por parte de la farmacia se hará siempre que la persona que se somete al autotest haya prestado su consentimiento.

En el caso de ser positivo, la farmacia comunicará el resultado a Sanitat y, desde el sistema de vigilancia epidemiológico, se podrá hacer seguimiento de los casos sin necesidad de que el paciente solicite cita y acuda a un centro sanitario para confirmar el resultado.

"Esta colaboración entre la Conselleria y los colegios nos ayudará a identificar los casos, realizar un mejor seguimiento y descongestionar los centros de Atención Primaria", puso en valor Barceló.

Baja laboral

Además, a través de la página web de la Conselleria, el paciente ya puede solicitar la baja laboral, que se concederá de forma simultánea con el alta para siete días después. En estos casos, a través de la inspección sanitaria, el parte de baja se comunicará al INSS y de este organismo, directamente a las empresas.

De esta forma "se descongestiona la actividad de los centros de salud por una doble vía", tanto el lo que se refiere a la realización de test, como en la tramitación de las altas y bajas laborales, ha afirmado Sanitat.