El Consejo Social de la Universitat Jaume I (UJI) reunido este lunes ha mostrado el apoyo a la reivindicación de la UJI de una financiación justa tanto para elaborar un presupuesto para 2023 como para la creación del nuevo plan plurianual de financiación. Así lo ha explicado este lunes el presidente de este órgano, Sebastián Pla, después de que el claustro acordara la semana pasada suspender el proceso de elaboración del presupuesto del 2023 para poder seguir negociando con la Generalitat una financiación justa que garantice las necesidades reales del funcionamiento de la UJI.

Pla señaló que "el Consejo Social ha mostrado un apoyo total a los planteamientos de la junta de gobierno y el claustro" y destacó "la total colaboración con el equipo de gobierno para conseguir que la Universitat no tenga problemas porque es lo que se merece la sociedad de Castelló y toda la provincia que se beneficia de su existencia y sin esta financiación correcta es difícil que podamos alcanzar estas metas". En ese sentido, señaló que este órgano se pone a disposición de la rectora y su equipo para estudiar cualquier iniciativa institucional que pueda redundar en su consecución.

Colaboración

Añadió que "no queremos poner ninguna piedra ni problema, al contrario, estamos colaborando tanto desde la Universidad como desde el Consejo Social con la Conselleria exponiendo nuestras razones porque entendemos que es el momento de la negociación y coordinación y explicar la justicia de nuestra reivindicación y de que se nos atienda".

Costes de personal

En lo que respecta al presupuesto del 2023, como publicó Mediterráneo, la diferencia entre los ingresos ordinarios consignados en el anteproyecto de presupuestos autonómico y el gasto real de la UJI es de 16,3 millones. La UJI plantea cubrir parte de ese déficit con 8,5 millones de remanentes propios de tesorería para sufragar costes energéticos y obras prioritarias, pero queda un desfase de 7,8 millones para equilibrar las cuentas. El problema es que la transferencia prevista por la Generalitat no permite asumir el aumento de costes de personal previsto por las normativas estatal y autonómica.

Aumento de gasto energético

En ese sentido, el presidente del consejo social señaló que "el incremento del coste de la vida ha sido realmente espectacular y lleva a unos desequilibrios en algunos suministros, especialmente en el eléctrico, de la energía; aparte, todas las contratas que la Universidad tiene para los servicios de limpieza, etc. suben de forma muy importante".

Pla señaló que "la UJI siempre ha hecho gala de austeridad en sus planteamientos". "La UJI ha presentado una serie de medidas para el ahorro energético y en todo tipo de programas, pero, a pesar de esto, vamos a tener desequilibrios si no se corrigen los planteamientos", añadió.

El vicerrector de Asuntos Económicos, Modesto Fabra, señaló que "el aumento coyuntural de los gastos energéticos lo pensábamos atender con cargo al remanente, que podemos utilizar para atender gastos que no son estructurales pero sí concretos y entendemos que se reconducirán con las medidas de ahorro y con la evolución previsible de los costes de la energía".

Costes de personal

Fabra señaló que "donde tenemos una dificultad real es y seria para poder encajar el aumento de costes es en el capítulo 1", de personal. Y es que existe según fuentes de la UJI un desequilibrio por el aumento de costes derivados de la aplicación de complementos por la normativa estatal y autonómica y por la estabilización de plantilla y nuevas necesidades de personal y con la previsión actual de ingresos, la universidad no puede garantizar el pago de las nóminas.

Fabra indicó que "estamos en negociaciones con la Conselleria para que la parte del aumento de los sueldos que todos los años nos han cubierto y que este año es extraordinaria es posible que se atienda.

Plan plurianual

Por otro lado, se une la problemática que se viene arrastrando porque la financiación de las universidades valencianas está enquistada en un plan que se va prorrogando sin tener un plan plurianual que reconozca la realidad actual de las universidades valencianas. "En eso se está trabajando y cuando vea la luz y sea admitido y aceptado por todas las universidades descansaremos todos, porque ya no será año a año lo que haya que luchar y debatir", apuntó Pla.

Fabra también abundó en que "respecto del plan plurianual de financiación han empezado ahora las negociaciones y esperamos que la propuesta acabe reflejando el crecimiento de actividad que ha tenido la UJI en los últimos años y el tamaño que tiene en cuanto a los servicios que realmente presta respecto al conjunto del sistema. En la primera propuesta, muy inicial, que nos presentaron no nos hemos visto del todo reflejados, pero estamos en un momento muy incipiente de la negociación. El problema real que tenemos ahora es en el presupuesto del 2023 y que se nos cubra la subida de costes salariales que nos han impuesto normas que no tenemos posibilidades de atender y que, además, se van a consolidar en ejercicios futuros.

130 millones de presupuestos

El presupuesto de la UJI asciende a 130 millones de euros, pero es difícil establecer una comparación con respecto al del año anterior porque ha habido un cambio en la forma en que se presupuestaba en años anteriores porque se han introducido matices de tipo técnico. Por un lado, la subida de costes de personal, otros años, no se presupuestaban porque cuando se aprobaba la modificación presupuestaria por parte de la Conselleria y se dotaba de crédito a la UJI se consignaba ingreso y gasto y, por otro, no se utilizaban remanentes de tesorería en el presupuesto inicial.

Apoyo de los sindicatos

Los sindicatos UGT y CCOO mostraron su apoyo a la Universitat Jaume I. Francisco Sacacia, secretario general de UGT en Castellón, señaló que "la UJI es un referente importante para la provincia y hay que hacer lo que haga falta para que no se vea afectada tanto en proyectos y en su día a día, como en los salarios del personal que está trabajando allí". Señaló que "lo que aporta Castelló al PIB per cápita es mayor que en Valencia y Alicante pero recibimos mucho menos. Que la autonomía está infrafinanciada es un hecho pero dentro de la infrafinanciación que tenemos, la provincia de Castellón está por debajo incluso". Por su parte, su homólogo de CCOO, Albert Fernández, mostró su apoyo a la determinación que se ha tomado desde las universidades, no solo la UJI, de no presentar sus presupuestos e instar al Gobierno de la Generalitat a que asuma la parte que debe asumir de las subidas salariales y el gasto energético. "No podemos tener universidades públicas de prestigio con investigadores y profesorado de prestigio si después no podemos afrontar el gasto que esto supone", concluyó.

Apoyo de la alcaldesa

Por su parte, la alcaldesa, Amparo Marco, ha trasladado su apoyo a la UJI en el consejo social y ha respaldado su reivindicación. Considera necesario que la universidad cuente con financiación suficiente y se garantice la sostenibilidad económica de una institución clave para el desarrollo económico y social.