TRAS RECIBIR EL PREMIO MÁXIMO

El Gordo en Castelló y Vinaròs anima las ventas de lotería para el sorteo del Niño

Seis de cada diez boletos premiados en Navidad se juegan de nuevo para Reyes

La administración de El Corte Inglés de Castelló que vendió una serie del Gordo tuvo una gran afluencia.

La administración de El Corte Inglés de Castelló que vendió una serie del Gordo tuvo una gran afluencia. / ANDREU ESTEBAN

Iván Checa

Iván Checa

Una vez asimilado el premio obtenido en el sorteo de Navidad, sobre todo en el caso de los castellonenses menos afortunados, este viernes fue día de lanzarse a la búsqueda de una segunda oportunidad, aún más si cabe cuando la suerte ya ha hecho acto de presencia en la provincia dejando parte del Gordo en Castelló y Vinaròs.

Fueron muchos los que aprovecharon el viernes para comprar décimos para el sorteo del Niño. Para ello, muchos de los que no se hicieron con el premio máximo o el pellizco del cuarto que hizo parada en Orpesa, utilizaron los cerca de 14 millones que suman las pedreas y aproximaciones que se estiman para el territorio castellonense. De hecho, seis de cada diez boletos premiados en Navidad vuelven a jugarse para la cita que coincide con el día de Reyes.

Cambio constante

Las colas volvieron este viernes a ser la estampa más repetida en las administraciones y puntos de venta de Loterías y Apuestas del Estado. "Es un cambio de décimos constante para el sorteo del Niño", confirmaron desde la lotería Sant Antoni de Benicàssim, donde la imagen no dejaba lugar a dudas.

Ocurría lo mismo en la capital. Un día después de dar el Gordo, la responsable de la administración de El Corte Inglés, Noelia Díaz, volvía a colocarse detrás de la ventanilla para atender a su clientela, tanto la habitual como muchos de los que acudieron allí confiando en que el premio máximo sirva de amuleto para atraer la suerte en la próxima oportunidad.

Muchos aprovecharon para cambiar los pequeños premios por otros décimos.

Muchos aprovecharon para cambiar los pequeños premios por otros décimos. / ANDREU ESTEBAN

Sin tregua

En la administración 6 de Castelló, en la avenida del Rey, los empleados no tuvieron apenas tregua ante las colas. Fina Cubedo explicó que los clientes acudieron de forma constante desde que levantaron la persiana: "Que haya tocado en la ciudad el Gordo anima mucho a la gente a que compre lotería para el sorteo del Niño, aunque se suele vender más a última hora, no como en Navidad para el que las compras se extienden durante varios meses", señaló la responsable.

Aunque los adeptos al sorteo del 6 de enero son menos respecto a Navidad, como confirman cada año los datos de ventas contabilizadas, los registros de Loterías y Apuestas del Estado muestran que el primer premio ha visitado la provincia en distintas ocasiones. Para encontrar la más reciente basta con remontarse hasta el año 2016, cuando el 22654 dio una alegría a vecinos de Castelló y la Vall d’Uixó. No es la única ocasión, pues en el 2008 ocurrió algo similar en la capital de la Plana a quienes compraron participaciones del 87657, permitiéndoles afrontar con mucha más facilidad la temida cuesta de enero.

La institucionalización de este sorteo se remonta al 1941 y anteriormente tenía lugar el 5 de enero, víspera de Reyes, fecha que se modificó para la rifa del 1999.

La dotación

En ambas citas, ya convertidas en instituciones propias de la época navideña, el importe destinado a premios alcanza el 70% de la emisión del sorteo. En concreto, para el Niño son 700 millones de euros. Cada décimo puede lograr 200.000 euros si obtiene el primer premio, 75.000 el segundo o 25.000 el tercero. En este caso el funcionamiento discurre de forma diferente, pues en lugar de extraer uno a uno todos los números premiados, el azar selecciona terminaciones distintas a partir de cinco bombos diferentes, beneficiándose del premio todos los boletos que la contengan.