El valor del suelo rústico alcanza su máximo histórico en Castellón

Las parcelas rústicas de la provincia de Castellón tienen más valor que nunca. Cada hectárea vale de media 1.918,49 euros. Es el máximo histórico desde el 1998 publicado recientemente en la estadística del catastro.

Los datos del Ministerio de Hacienda y Función Pública recogen una evolución al alza del valor prácticamente ininterrumpida desde el 2004, si bien la misma se acentúa en la última década.

Una tendencia que desde la Unió Llauradora atribuyen principalmente a las revisiones realizadas desde el Ministerio de Hacienda y Función Pública: «Sobre todo desde el 2014 nos constan multitud de revisiones catastrales de parcelas rústicas que tenían algún tipo de construcción, como casetas agrícolas o granjas», analizan desde la entidad, añadiendo que al mismo tiempo estas modificaciones han derivado en algunos litigios con la administración al «estipular valores muy altos, por encima de la realidad».

Repercusión en el IBI

«El aumento en muchos casos era desproporcionado y esto generaba también una mayor carga de IBI», comentan las mismas fuentes, señalando que poco a poco se han ido resolviendo los diferentes casos, obteniendo la razón los agricultores de la provincia.

Más allá, pese a estar ya en máximos, la Unió considera que el valor de los terrenos irá a más con la implantación de renovables en el territorio: «Al final seguirá el mismo camino que las revisiones de las granjas, pues las instalaciones empujarán hacia arriba la valoración de las parcelas».

Por otro lado, la misma estadística pone de manifiesto otras cifras que muestran la situación de estos terrenos en la provincia, como que el 46% del suelo rústico se corresponde con pastos y terrenos incultos, mientras que el 21% cuenta con especies maderables de crecimiento lento. Los cítricos, pese a la importancia a nivel provincial, apenas suponen un 6% de la superficie y los cultivos de secano otro 5%. 

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