Compás de espera por Marie Claire

El futuro de Marie Claire sigue siendo una incógnita. Y eso que lo sucedido en las últimas horas hace sospechar que la centenaria textil de Vilafranca podría estar abocada a la liquidación. La empresa navarra Cabanillas, uno de los dos grupos de inversión que a principios de mes mostró su interés de adquirir la fábrica de Els Ports, ha dado marcha atrás y al parecer ha desistido de formalizar su oferta de compra, mientras que a la mesa de la titular del juzgado de lo Mercantil número 1 de Castellón no ha llegado ninguna propuesta más. La última esperanza está puesta en la empresa polaca Koltex Kolbuszowa, que el pasado 8 de abril presentó ante el órgano judicial una oferta formal de compra y que tenía de plazo hasta ayer miércoles para, y tal y como le requirió el administrador concursal, acreditar su solvencia y presentar nueva documentación. 

Marie Claire afronta su semana más decisiva

La magistrada del juzgado de lo Mercantil, el órgano que se encarga de tramitar el concurso de acreedores en el que se halla inmerso Marie Claire desde el pasado mes de septiembre, estableció como fecha límite este miércoles, 24 de abril, para que Koltex aportara la documentación. También fijó ese tope para que el grupo textil navarro presentará formalmente su oferta de compra y dio la posibilidad a otros grupos interesados en adquirir la unidad productiva de Vilafranca de hacer lo mismo. No obstante, y según ha podido saber este periódico, Cabanilles habría desistido, mientras que no ha trascendido si finalmente Koltex ha cumplido con los plazos y ha demostrado la viabilidad de su plan de negocio.

El grupo polaco Koltex, que realizó la oferta de compra a través de su filial española Formen SA, ofrece 250.000 euros por la fábrica de Vilafranca y se compromete a rescatar a los 72 trabajadores que se encuentran en ERTE, así como a contratar a parte de la plantilla que el pasado verano fue despedida. La propuesta contempla asimismo invertir tres millones de euros en los próximos tres años para relanzar la marca (este grupo se compromete a continuar con la fabricación de medias, calcetines y ropa de baño bajo las marcas Marie Claire y Kler y reintroducir Cherie como segunda marca y orientarla a un público joven). Estos inversores aseguran en su oferta que asumirán el pago de la deuda de las naves de Vilafranca y que ascienden a 1,5 millones de euros y también el abono de parte de un crédito con el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) que se encuentra vinculado a la garantía de maquinaria. No obstante, la oferta de Koltex no contempla asumir la deuda de la textil y que asciende a cerca de 40 millones de euros, la mayoría con el banco de la Generalitat valenciana.

El círculo se va estrechando (a finales de marzo el fondo madrileño C2 Private Capital también retiró su oferta) y todo apunta a que el futuro de Marie Claire continúa pendiendo de un hilo. 

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