Castellón cuenta desde ayer con más guardias civiles en sus cuarteles. En total 67 fueron los agentes que llegaron a la comandancia de la Benemérita para trabajar en 21 municipios de la provincia. De estos, 35 cubren bajas y los otros 32 ocupan plazas de nueva creación, por lo que la plantilla de este cuerpo se ha incrementado este año sobremanera.

El acto estuvo presidido por el general de la Guardia Civil, Fernando Santafé, así como por el delegado del Gobierno en la Comunitat, Serafín Castellano; y el coronel Juan José Miralles.

Santafé instó a los nuevos guardias civiles a “resolver los problemas de los ciudadanos” y a “estar en contacto permanente con los agricultores y los regantes para disminuir los robos en el campo”. El general también les animó a “conocer el valenciano, integrarse en la sociedad castellonense y a motivarse con los nuevos retos”. Finalmente, les aseguró: “Todos somos imprescindibles y necesarios y nuestro objetivo es que baje la delincuencia en Castellón”.

MENOS DELITOS // Por su parte, Serafín Castellano alabó el esfuerzo del Gobierno al incrementar en 32 nuevos agentes la plantilla de la Guardia Civil de la provincia: “Hoy Castellón es más segura, tal y como ponen de manifiesto las estadísticas de criminalidad. Durante el primer trimestre del año los delitos y faltas descendieron un 9,8% respecto a los tres primeros meses del año pasado; los robos con intimidación se redujeron un 42,8%, y los robos con fuerza un 16,5%”. Y auguró: “Los datos que manejamos para el primer semestre apuntan hacia una consolidación de esta tendencia”.

Castellano recordó que cerca de 4.100 guardias civiles integran el dispositivo especial de las zonas turísticas este verano porque “turismo y seguridad van unidos”. Asimismo, desveló que durante el FIB de Benicàssim ha habido “menos delincuencia que nunca”. H