El Ayuntamiento de Castelló quiere evitar que durante la semana en la que se habrían celebrado las fiestas de la Magdalena se produzca un aumento de la movilidad en la ciudad y, para ello, se ha anunciado el establecimiento de un dispositivo especial de seguridad entre el 6 (próximo sábado) y el 14 de marzo.

Especial atención prestará la Policía Local al entorno y los accesos de la ermita el próximo domingo, cuando, en condiciones normales, se habría celebrado la multitudinaria Romería de las cañas. En la vigilancia participarán también Protección civil y otras fuerzas y cuerpos de seguridad, para limitar el acceso «tanto de personas como de vehículos», precisó ayer el concejal de Seguridad Pública, David Donate.

Aunque el consistorio confía en el comportamiento responsable de la mayoría de la población, el propósito de estas medidas extraordinarias es «evitar situaciones o actividades que comporten riesgo sanitario». Para ello, durante toda la semana «habrá más efectivos desplegados por toda la ciudad para controlar y supervisar que se cumplen las restricciones», detalló el concejal.

«Hay que minimizar al máximo las posibilidades de aglomeraciones y otras situaciones que comportan riesgos de contagios y de propagación del virus», concluyó Donate, que apeló a la colaboración de toda la ciudadanía.