La Comunidad de Regantes de Castelló celebra hoy su asamblea general ordinaria, en la que además de tratar los números principales de la organización se hará un repaso a los principales asuntos que preocupan al sector agrario de la capital. Entre ellos, el coste adicional que supondrá el nuevo sistema de tarifas eléctricas. El presidente de la comunidad, José Pascual, recuerda que en el pasado año «la factura ascendió a más de 150.000 euros, y tememos que el incremento pueda ser de hasta el 40%».

Desde hace años se aplican medidas para el ahorro del consumo energético en el proceso de llevar el agua a los productores del término municipal. «Una buena parte de la actividad ya se realiza en fines de semana y por la noche, cuando las tarifas son más bajas, pero tenemos el problema del mes de agosto», señala, para añadir que en ese periodo, una época del año en la que se necesita un riego más frecuente, ya no disfrutarán de tarifas reducidas. «Algo que repercutirá en los costes», asevera.

Mantenimiento

Además, comenta que hay actuaciones «que solo se pueden hacer por el día, como las labores de mantenimiento y reparación de las infraestructuras», cuyo funcionamiento se suele realizar en horarios que disparan la factura

En cuanto al desarrollo de la asamblea, será la primera que se celebre desde el inicio de la pandemia, e incluye en el orden del día el presupuesto para el presente año. «Las cuentas consolidadas ascienden a los 13 millones de euros, que son el presupuesto consolidado, que incluye tanto el coste de las instalaciones como el coste de las actividades». Entre las inversiones que destaca, están los 70.000 euros destinados a la reparación de comunicaciones. «Fue como consecuencia de la caída de un rayo, y de todo este gasto el 90% está abonado por el seguro», comenta José Pascual.

Preocupaciones

Una de las preocupaciones que envuelve a los integrantes de este colectivo con orígenes que se remontan a finales del siglo XIX es el coste de las plagas. «Había productos que eran eficaces para controlarlas», comenta pero las prohibiciones de los últimos tiempos han dificultado la labor de los regantes.

En una vertiente más favorable está el régimen de lluvias de los últimos tiempos, que es positivo, gracias a las lluvias caídas en la primavera del 2021 y el presente año. Algo que, al menos durante un tiempo, aleja los problemas de la sequía. «En estos momentos disponemos de agua suficiente, con los pantanos de Arenós y Sitjar que funcionan correctamente y que incluso en algún momento han tenido que hacer desembalses técnicos». A ello se unen las actuaciones de las últimas décadas para tener una mayor eficiencia hídrica, mediante el goteo, que supone un uso mucho menor del agua.

El presidente anuncia el relevo tras más de tres décadas en el cargo

La asamblea de hoy, que tendrá lugar en la sede de la Cámara Agraria a partir de las 18.30 horas en primera convocatoria, será también la última que presida José Pascual como presidente de la Comunidad de Regantes de Castellón. Un cargo que asumió en 1990, tras haber entrado en el sindicato de regantes en 1985. De hecho, en los últimos tiempos ya se había oficializado el relevo en el sindicato, presidido en la actualidad por Pepe Cueva, y que presumiblemente asumirá esta función en la comunidad, que cuenta con unos 3.000 asociados, entre pequeños productores y grandes agricultores.

A lo largo de su mandato, Pepe Pascual ha presenciado la irrupción de nuevos medios para ser más eficientes en el riego, pero a la vez una fuerte reducción de las superficies de cultivo. «Hace 30 años había 36.000 hanegadas y ahora son unas 12.000». Una cifra que deja muy a las claras el abandono progresivo que sufre el sector agrario.