CD Castellón | La varita de Dick Schreuder

Es cierto que al Castellón cada vez lo conocen más el resto de equipos, que le complican con sus planteamientos. Y no es menos cierto que la respuesta de Dick Schreuder con los cambios está dando sus réditos. La aportación del banquillo ha resultado decisiva en los últimos partidos de los albinegros.

No hace falta irse muy lejos. En el encuentro más reciente, en la visita al feudo del Atlético de Madrid B, los locales anotaron el 1-0 justo cuando Schreuder preparaba los cambios. Una vez sobre el verde, y en desventaja, los relevos funcionaron. Nikita Iosifov y Douglas Aurélio aportaron la amplitud y la profundidad necesaria, y entre Isra Suero (asistente) y Gervane Kastaneer (goleador) tejieron el 1-1 sanador del descuento.

El estreno redentor de Kastaneer en el Castellón: se desprende del 'casi gol'

Competitivo

La dirección de campo de Schreuder y la profundidad de la plantilla le están dando al Castellón, actual colíder, un extra de competitividad en las últimas semanas. En el partido más reciente en el Estadio Castalia, por ejemplo, los cambios de Schreuder (que modificó la defensa y el centro del campo) frenaron la sangría ofensiva que generó el Antequera en el inicio de primer acto. Lo hizo, además, a su manera: acumuló futbolistas con buen pie en el centro del campo para recuperar el control y sufrir menos en defensa. 

En concreto, pasó de jugar en la medular con Óscar Gil, Iago Indias y Moyita a hacerlo con Calavera, Julio Gracia y Medunjanin, que retrasó su posición. El movimiento tiene mucho de simbólico respecto a la gestión de las ventajas que está realizando esta temporada de récords el equipo albinegro. Schreuder está reeducando al equipo en ese aspecto: la ventaja se defiende atacando.

Rebobinando en estos primeros partidos del 2024, también resultó decisivo el cambio realizado en el descanso en el complicado duelo de La Rosaleda. Manu Sánchez salió desde el banquillo y tuvo un impacto inmediato, coronado por el cabezazo que valió la victoria contra el Málaga (0-1). Una semana antes, en Castalia contra el Algeciras, la entrada de Traoré causó un efecto similar: agitó el ataque y construyó la acción que supuso el segundo gol albinegro.

Marcar primero

La varita de Schreuder con la sustituciones suele lanzar el mensaje habitual de su credo. No se puede jugar con miedo. Después de 22 jornadas, se puede afirmar que esta idea ambiciosa está funcionando y la sostienen los números. Siempre que ha marcado primero, el Castellón ha terminado ganando el partido. Nunca ha cedido un empate o una derrota cuando se ha puesto por delante en el marcador. Así ha ocurrido en 16 ocasiones en lo que va de campeonato liguero.

Por contra, cuando ha encajado primero, el equipo de Schreuder ha sido capaz de reaccionar en varios partidos. Además del reseñado empate salvado contra el filial del Atlético, el Castellón pasó del 1-0 al 1-1 a domicilio contra el Antequera; y del 1-0 al 1-3 también fuera de casa contra el Ceuta, justo el próximo en visitar el Estadio Castalia. El conjunto ceutí, otro aspirante a la promoción de ascenso, exigirá lo mejor del Castellón con dos exalbinegros: Cristian Rodríguez y Dani Romera.

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