Consorci y la CHJ no auxiliarán a los peces del Millars al no estar protegidos

Ni la Confederación Hidrográfica del Jucar (CHJ), competente en la materia, ni el Consorci del Millars tienen previsto actuar en el cauce del río, especialmente en el tramo del paraje protegido de la desembocadura, donde la falta de caudal ha causado la muerte de numerosos peces y ha dejado a decenas de ejemplares atrapados en charcas de agua.

Fuentes de la CHJ aseguraron ayer que “no se trata de un problema de calidad del agua, sino de cantidad”, que ha sucedido otros años, provocado por las intensas lluvias registradas, que obligaron a la apertura de compuertas de los embalses y que, posteriormente, al disminuir el caudal que se vertía al mar, ha inmovilizado a unas carpas “sin ningún valor ecológico”. No obstante, eso sí, evaluarán visitar la zona y valorarán retirar los ejemplares muertos, como han hecho anteriormente en otros puntos.

En términos similares se expresan desde el Consorci del Millars, que técnicamente “no considera la situación un problema, forma parte del ciclo de la vida del río”. Explican que, “tras las avenidas de agua caudalosas que generan vida, esta sirve para alimentar a las aves que viven en el humedal”, además de que “las especies que mueren son carpas, no se trata de ejemplares protegidos”.

A pesar de ello, el presidente del Consorci, Vicente Casanova, solicitó analizar técnicamente esta situación. Por ello, el técnico municipal contactó con los guardas del Millars y visitaron el entorno que, en el caso de Almassora, se localiza en les Reballadores. “Sin embargo, el caudal ha aumentado y no es necesario” en este punto, explican fuentes del organismo, que también contactó con el Sindicato Central de Aguas del Millars para analizar esta situación que se produce cuando, tras avenidas de agua caudalosas, los niveles del río vuelven a bajar. “El sindicato, sin embargo, solo gestiona el caudal que la Confederación Hidrográfica les facilita para el riego”, añadieron.

diversos focos // Lo cierto es que hay diversas áreas con esta llamativa problemática a lo largo del Millars, además de la pasarela hormigonada que cruza el río y une los términos de Almassora y Burriana por Santa Bárbara, donde se ha detectado un elevado número de carpas muertas y otras atrapadas en charcos donde el nivel del agua es muy bajo, y en cuestión de días está previsto que se seque ya por completo.

Otros puntos se localizan tanto en el término de Vila-real como en el de Almassora. La realidad es que la ausencia de un caudal ecológico o mínimo condena a muerte a estos ejemplares por no tratarse de una especie protegida reconocida y que obligue a las administraciones a mover ficha . H