Peñíscola reabre la playa Norte tras conocer que no hay peligro

La actividad turística de Peñíscola presentó en la jornada de ayer una aparente tranquilidad, a pesar de las molestias causadas por la prohibición de bañarse en la playa Norte debido al hallazgo de parámetros biológicos anormales en las muestras que semanalmente realiza la Dirección General del Agua de la Generalitat.

La bandera roja ondeó durante todo el día y, como medida informativa adicional, colocaron carteles en vallas situadas en los accesos. El concejal de Turismo y Playas, Rafael Suescun, indicó que los nuevos análisis encargados, efectuados a primera hora de ayer, «necesitan de la realización de cultivos y ello hace que se dilate el resultado», detalló.

Prevén que este mediodía ya dispongan de los datos y que estos permitan la reapertura del principal tramo de costa del municipio. «Según la dirección general, el muestreo será previsiblemente conforme, ya que se evalúa como un episodio pasajero», añadió el edil. Por el momento, ignoran qué ha causado estas alteraciones, aunque descartan que el origen se encuentre en un fallo de funcionamiento de la depuradora de aguas residuales. Desde el Ayuntamiento solicitaron una comprobación a la Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (EPSAR), que no ha identificado ninguna incidencia.

ALTERNATIVAS

Desde que tuvieron conocimiento de lo ocurrido, en la tarde del miércoles, los turistas han hecho planes alternativos. La playa Sur, totalmente apta para el baño, registró ayer una afluencia notable, sobre todo en el agua. «Es un sitio que me encanta y la verdad es que está lleno», comentaba Lucía, una mujer que se aloja en un hotel cercano.

El presidente de la patronal Agretur, Francisco Ribera, aludió a la «normalidad, con gente que ha tomado el sol y ha utilizado las instalaciones de los complejos turísticos». Especialmente las piscinas, donde los usuarios trataron de sofocar los casi 35 grados del día de ayer.