Nules no ha querido esperar más una reacción de la dirección general de Costas y este fin de semana ha decidido actuar por su cuenta. El alcalde, David García, tras hablar con vecinos y resto de partidos políticos con representación municipal, firmó ayer un decreto en el que, en virtud de las competencias que le confiere la ley en materia de protección civil, ordena la construcción de un muro de contención del mar frente a las viviendas de la playa del Bovalar —la situada al norte junto al faro— que esta semana han sufrido destrozos como consecuencia de los últimos temporales.
Para García, la situación de emergencia o catástrofe a la que hace referencia la legislación actual «está probada». En especial, según ha remarcado esta mañana, porque en esas viviendas «hay gente que vive todo lo año, por lo que corren un grave riesgo». Y aunque el temporal Blas ya ha pasado, recuerda que con el otoño se inicia la temporada de borrascas, por lo que lo peor solo acaba de empezar.
Durante todo el fin de semana, la empresa contratada por el consistorio con carácter de urgencia, depositará en esta zona del litoral toneladas y toneladas de grandes rocas con las que se está construyendo un muro que alcanzará alrededor de los 80 metros lineales frente a las mencionadas casetes. La solución técnica que se ha escogido es colocarla lo suficientemente cerca de las construcciones y a una altura adecuada como para posibilitar que las olas rompan sobre la piedra y no sobre las casas, y mitigar los daños que puedan producirse en el caso de que lleguen grandes temporales como Gloria o Filomena, cuyos efectos todavía están presentes en esta zona del litoral, pues desde entonces no se ha invertido por repararlos.
Explica la concejala de Playas, María José Esteban, que esta intervención también contempla retirar las gravas que el mar depositó en el canal de la Gola, durante el temporal, y colocarla en el espacio que quedará entre el improvisado muro de contención y las viviendas, a modo de refuerzo. De esta forma, aprovechan una actuación necesaria —la de eliminar obstáculos y obstrucciones en el canal por el que desagua la Marjaleria— para completar otra de una manera ágil y, esperan, efectiva.
Una reacción demandada
Numerosas personas se están acercando a lo largo del día de hoy a la zona y algunas se sorprenden por unos trabajos inesperados. Una familia que no vive en Nules pero sí que tienen una casa familiar en primera fila en este punto del litoral que visitan verano tras verano, destacaban a Mediterráneo la evidencia que vienen defendiendo los vecinos desde siempre, que hace no tanto años el mar estaba muy lejos de los edificios y que con el paso del tiempo se ha ido acercando año tras año hasta acabar «literalmente dentro».
Manel Alagarda, portavoz de la Associació Platges de Nules, aseguró que «estamos muy contentos porque esto es lo que estábamos pidiendo, que se actuara y que se protegiera la playa». Desde la entidad vecinal son conscientes de que se trata de una solución provisional, pero «es que hacía falta reaccionar ante la emergencia de alguna manera».
Otro integrantes de la plataforma ciudadana, Santiago Carreguí, recordaba ante las máquinas en plenos trabajos de construcción del muro, que «está siendo muy duro. Llevamos años diciendo que el mar iba a acabar dentro de las casas y esta semana ha pasado».
Intervención sin permiso
Esta actuación se está realizando sin informar a Costas y, por tanto, sin esperar su autorización. Así lo reconoce el alcalde, aunque insiste en que la situación de emergencia y de riesgo para la población requería una respuesta urgente del Ayuntamiento, y refuerza la firma del decreto —que así lo argumenta— en la ley de Protección Civil.
García anuncia que este lunes mantendrán una reunión con representantes del Ministerio en Castellón. En el encuentro expondrán sus demandas y exigirán que liciten de una vez las obras de construcción de los espigones proyectados para el municipio. «Al menos, con carácter de emergencia, el que se encuentra frente al faro, que es el que protegería la zona de la playa más afectada», remarca.
