Las fiestas patronales de Vall d’Alba finalizaron con un balance altamente satisfactorio. «Son la mejor prueba de que hemos acertado plenamente con el cerca de centenar de actos y festejos que han compuesto el programa festivo», aseguró la alcaldesa, Marta Barrachina, quien destacó «la alta participación en todos los actos programados y la colaboración de los vecinos para que todo saliese a la perfección». 

En este sentido, Barrachina aseguró que, después de dos años de pandemia, han logrado superarse y «desarrollar un programa intenso y extenso gracias a contar con el apoyo de las distintas asociaciones y colectivos existentes en el municipio. Todos ellos nos han ayudado a hacer que nuestras fiestas sean más grandes y, sobre todo, más populares».

La última jornada de los festejos se caracterizó por la elevada participación popular, ya que los espectáculos taurinos que, prácticamente coparon la programación del día, atrajeron a muchos aficionados de muchos municipios de la provincia de Castellón. 

Por la mañana hubo concentración y entrada de caballos y mansos, posteriormente, se llevó a cabo el tradicional encierro con 6 toros de la ganadería de Germán Vidal de Cabanes. Y, ya por la tarde, se desarrolló un gran espectáculo taurino en la plaza de toros con exhibición de anillas, demostraciones ecuestres y recortes tanto masculinos como femeninos. 

Broche de oro

El broche de oro a las brillantes celebraciones patronales de Vall d’Alba se puso anoche con un correfocs y un espectáculo pirotécnico que anunció a todos los vecinos el final de 10 días de intensas fiestas.

Además, atrás quedan citas gastronómicas multitudinarias como la fideua monumental o la cena de peñas y el tombet de bou, además de las actuaciones musicales y culturales.