Una vez al año, coincidiendo con el inicio del curso escolar, el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó organiza un acto en el que pretende visibilizar y premiar la cultura del esfuerzo. Desde la concejalía de Educación, se concede una beca a los estudiantes más destacadas que han completado ciclo de una manera excelente. En esta ocasión, han sido 18 los alumnos distinguidos por el consistorio.

Los estudiantes becados por el consistorio han completado una etapa educativa en bachillerato, ciclos formativos y el Conservatorio de Música, y ellos son: Pascual Ayet Doñate, Vicent Marzà Botet, Laura Nebot Astasio, Moisés Sepúlveda Segarra, Maia Rebollar Moliner, Miriam Cabrera Pedro, Nacho Serra Sánchez, José Luis Monteagudo Moya, Mª José Silvestre Piqueras, David Herrero Mompó, Amanda Borrás Salvador, Marc Aznar Beltrán, Rosa Fresquet Cucala, Leyre García Orenga, Lucía García Salvador, Ingrid Peñarroja Martí, Antonio Marcobal Dupla y Sandra Asensi Muñoz. 

Para cada línea de bachillerato y ciclos formativos se establece una beca de 500 euros, una ayuda económica con la que el Ayuntamiento pretende contribuir a la continuidad de su formación.

Invitado y orador

En el acto, intervino como invitado un joven de la localidad que se distingue por su vocación de servicio y colaboración. Licenciado en Historia, Jorge Marqués es presidente de la falla Ja Estem Tots, además de activista social y cultural. Inició su alocución con una frase contundente. «Ni el éxito es definitivo, ni el fracaso letal», comentó.

Marqués defendió la necesidad de «salir de la zona de confort» y apeló a «aprovechar la oportunidad que la educación os brinda» y a que «no os creéis esquemas, porque nunca se cumplen. Las oportunidades llegan sin darse cuenta». Concluyó emplazándolos a «cooperar y compartir», en un sistema que «os aboca a competir» y los animó a «no dejar nunca a nadie atrás». «Agarrad a la gente de la mano e intentad dejar siempre el mundo mejor de como os lo encontrasteis», remarcó.

En el acto también intervinieron la concejala de Educación, Carmen García, y la alcaldesa, Tania Baños. La primera defendió que «las dificultades y los fracasos suponen nuevas oportunidades». La segunda sacó pechó de una circunstancia que considera excepcional: «La Vall es la capital de la educación pública, porque todos nuestros centros educativos lo son, y es algo de lo que estamos orgullosos, garantiza las oportunidades para todo el alumnado».