El cielo de Peñíscola se ha llenado este martes de melodías y pólvora con el multitudinario piromusical enmarcado dentro del XXVII Festival Internacional de Música Antigua y Barroca, que se celebra en el municipio hasta el domingo, 7 de agosto. 

El esperado evento ha reunido a miles de personas en el paseo marítimo y en la playa Norte que no han querido perderse el tradicional espectáculo, recuperado anoche después de tres años sin celebrarse a causa de la pandemia del coronavirus. La Pirotecnia Tomás de Benicarló, con el experimentado Miguel Ángel Tomás al frente, ha sido la encargada de deslumbrar al público con un lanzamiento de más de 9.900 unidades y 500 kilos de pólvora en un espectáculo de 21 minutos de duración.

El fuego estático, aéreo y acuático se ha sincronizado con el espectáculo al ritmo de una selección de piezas musicales de Mesías de Händel. Asimismo, la pirotecnia se ha lanzado desde distintos puntos de la ciudadela como la propia el mar y la arena de la playa Norte, las murallas de la fortaleza y la Porteta de Peñíscola.

Próximas actividades

Hoy, miércoles, continúa la programación con Martos & Márquez y su El violín real (22.30 horas, en el castillo). El programa contiene la integral de las sonatas que se conservan para violín y bajo continuo del autor valenciano José Herrando.

La segunda propuesta internacional de esta edición será la de mañana, jueves (22.30), con el contratenor inglés Alex Potter, acompañado por clavicémbalo y viola de gamba, con el espectáculo Orpheus Britannicus & Friends de música de Purcell y contemporáneos menos conocidos. Por otra parte, el ciclo apuesta por el público familiar con de una visita guiada y un concierto participativo que tiene lugar cada día a las 20.30 horas en la Casa del Agua.