Si el 2002 finalizó con la gran decepción de la eliminación copera ante el Hércules, a las primeras de cambio y con el resultado de la destitución de Víctor Muñoz, el camino del Villarreal en la Copa del Rey en el 2003 ha sido completamente inmaculado. El conjunto amarillo ha superado las dos primeras eliminatorias de la presente edición, ambas a partido único, en Alicante (1-2) y en Algeciras (0-1), resultados que han despejado el camino para poder llegar lejos en el torneo del KO. Los de Benito Floro han acabado el año dentro del selecto grupo de los octavos de final, ronda que iniciarán a principios de enero en El Madrigal ante el Sevilla.