El Villarreal se ha hecho esta temporada inmune a las lesiones de sus principales estrellas. A pesar de las prolongadas ausencias de Juan Román Riquelme --el cerebro del equipo--, Diego Forlán --el goleador-- y Juan Pablo Sorín --el jugador más polivalente del Submarino--, los de Manuel Pellegrini no sólo han mantenido el tipo, sino que han mejorado sus prestaciones con respecto a la pasada temporada. El Villarreal, con la plaga de ausencias destacadas incluida, ocupa en estos momentos una plaza de Liga de Campeones y ha acabado como primero de grupo la primera fase del torneo continental, mientras que en el ejercicio 2004/05, sin tantas bajas relevantes, el equipo se debatía en la 12ª posición a estas alturas de la Liga.

Juan Román Riquelme, el auténtico referente de los amarillos, ya se ha perdido en lo que llevamos de temporada seis encuentros (cuatro de la competición doméstica y dos de Liga de Campeones), una situación poco habitual para el centrocampista argentino, que la pasada campaña tan sólo se quedó sin participar en tres encuentros de Liga. Sin Riquelme en el equipo, el Villarreal no ha salido derrotado en ninguna ocasión esta temporada, incluyendo los dos complicadísimos compromisos de Champions ante el Manchester United. En la anterior campaña, la primera ausencia del Mago provocó la derrota del Submarino en el Calderón, mientras que se ganó un partido (4-0 al Getafe) y se empató otro (3-3 en el Camp Nou) en las dos restantes incomparecencias.

SIN EL BOTA DE ORO Pero el Villarreal no sólo se ha tenido que sobreponer demasiadas veces este año a la ausencia de Román. Forlán, el Bota de Oro de la pasada temporada, se ha perdido el mismo número de encuentros que su compañero de equipo, cinco de Liga y uno de Champions. Sin su principal finalizador, el Submarino también ha salido indemne, con la única excepción de la derrota en casa ante el Barcelona. El caso del delantero uruguayo es, incluso, más significativo que el de Román, ya que en la Liga 2004/05 (no pudo jugar la competición europea) disputó la totalidad de los 38 compromisos del equipo. Pellegrini ha descubierto que, aunque con más dificultades cara a la portería contraria, el Villarreal también puede vivir sin su pichichi.

Sorín es el último de los futbolistas importantes del Villarreal que se une al club de las ausencias prolongadas. El argentino ya se perdió el inicio de la temporada por culpa de una lesión en el partido inaugural de la Liga ante el Osasuna y no podrá finalizar el año sobre el terreno de juego al lastimarse en el último partido de la primera fase de la Champions ante el Lille. Sumando los dos próximos partidos de Liga (Getafe y Málaga), Juampi acabará la primera parte de la temporada 2005/06 con siete partidos menos en sus estadísticas.