Una jornada más y el Villarreal no acaba de despegar, a pesar de la mejoría de imagen que se pudo observar en la segunda parte de la última visita a Riazor. El equipo de Manuel Pellegrini volverá hoy a los entrenamientos con varias tareas pendientes para recibir el domingo al Zaragoza, en el que se espera sea el punto de inflexión de un Villarreal al que le ha costado arrancar en las tres últimas campañas.

Dejando de lado la vertiente histórica del mal inicio liguero de los amarillos, que llegarán a la cuarta jornada con un punto, sin conocer la victoria y, lo peor de todo, con el casillero de goles a cero, hay varios aspectos que han motivado que el Submarino esté en estos momentos en punto muerto. Evidentemente, la citada falta de gol supone el peor lastre. Esta sequía sí supone una gran novedad para el Villarreal, que nunca había acumulado tres jornadas de Liga sin marcar en Primera. Es más, los amarillos siempre habían logrado estrenar su apartado goleador en el debut.

A nivel particular, la situación también es totalmente sorprendente para los dos referentes ofensivos del actual Villarreal: Forlán y Nihat. sus dos primeras campañas en la Liga española (2004/05 y 2005/06), el uruguayo había conseguido empezar a marcar en el debut. ¿Y Nihat? Baste decir que el internacional turco siempre había conseguido mojar en sus estrenos como titular en las cuatro temporadas precedentes. Las soluciones de Franco y José Mari tampoco han podido dar sus frutos todavía.

Pero sería injusto dar toda la responsabilidad del mal momento del equipo a los hombres más adelantados, ya que ha sido un cúmulo de circunstancias adversas los que han impedido que los amarillos todavía no hayan podido dar muestras de su verdadero potencial en estos primeros compases de la Liga.

Como no, las lesiones han tenido su gran parte de culpa, con las importantes ausencias --y va para largo-- de Pir¨s y Gonzalo, dos de los bastiones de Pellegrini para esta temporada. A la larga lista de la enfermería se han añadido Josico, Cygan o Peña, el último en caer víctima de los problemas físicos. Las ausencias defensivas parecen estar bien cubiertas tras el esperanzador debut de Fabricio Fuentes, pero el relevo de un creativo como Pir¨s todavía está en el aire.

DUDAS EN DEFENSA La seguridad defensiva también plantea ciertas dudas en estos compases iniciales de Liga. El tempranero gol del Depor el pasado sábado evidenció las lagunas de concentración de la zaga amarilla, que después se hace muy cuesta arriba enmendar. Capítulo aparte merece la portería, una plaza cuestionada desde la marcha de Reina al Liverpool. Ni Barbosa, primero, ni Viera han ofrecido garantías suficientes. El uruguayo, titular ahora, ofrece algunas acciones que dan pie a la inseguridad.

De mometno, Pellegrini no acaba de dar con la fórmula. A buen seguro que con la primera victoria llegará la solución a todos --o casi todos-- los problemas del equipo. El domingo, el Zaragoza debe ser el mejor antídoto en El Madrigal.