Peleó como una jabata pero al final a Sara Sorribes se le escapó la victoria en su primera final de un torneo WTA 125, el que concluyó ayer en la ciudad croata de Bol.

Las previsiones se cumplieron y el título se lo disputaron las dos primeras cabezas de serie, la eslovena Tamara Zidansek, número 60 en el ranking mundial, y la valldeuxense, situada en el 75.

Sara, que no había cedido un set en todo el torneo, acabó perdiendo la final tras un igualadísimo partido que se resolvió por un doble 7-5 a favor de la croata.

La primera manga ya marcó la tónica del encuentro, con las dos tenistas rindiendo al máximo de sus posibilidades y un marcador que no se decantaba con claridad a favor de ninguna de ellas.

El primer momento decisivo se vivió en el larguísimo último juego, con múltiples deuce, en el que finalmente Zidansek rompió el servicio de la valldeuxense para anotarse el primer set.

Sara no se vino abajo y respondió rompiéndole a su vez el servicio a su oponente para anotarse el primer juego de la segunda manga, y pese a perder los tres siguientes juegos se rehizo de nuevo para ponerse 3-4 arriba.

De rotura de servicio a rotura de servicio, la eslovena puso el 4-4 pero Sara estableció el 4-5 y sirvió para ganar el set. Fue entonces cuando Zidansek asestó el golpe definitivo para ganar en Bol.

Casi sin tiempo para descansar, Sara Sorribes debutará mañana en el torneo de Nottingham (Gran Bretaña), ante la norteamericana Shelby Rogers.