Un bosque descuidado crece 3.000 hectáreas al año en Castellón

La superficie forestal en la provincia de Castellón ha crecido un 14% en los últimos 50 años y ello supone un problema añadido en el control antiincendios. El estudio, publicado en una reciente tesis doctoral, estudia la evolución de la superficie boscosa en la provincia entre los años 1957 y 2007 y calcula un crecimiento aproximado de 3.000 hectáreas por año.

Respecto a la comparación de estas cifras con la situación actual del planeta, cabe destacar que la provincia se encuentra en un proceso no generalizado de crecimiento forestal y que afecta a los umbrales de riesgo de incendios. Y es que según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) indica que entre 1990 y 2015, la superficie forestal del planeta disminuyó del 31,6 % al 30,6 %, aunque el ritmo de pérdida se ha ralentizado en los últimos años. El análisis añade que la mayor parte de esta pérdida tuvo lugar en países en desarrollo, en particular en el África Subsahariana, América Latina y Asia Sudoriental.

Además, en el caso de Castellón se encuentra la problemática de la propiedad privada, ya que según el Plan de Acción Territorial Forestal de la Comunitat Valenciana (realizado por la Conselleria de Agricultura), el terreno privado en la provincia es del 71%, con la dificultad que ello conlleva para poner de acuerdo a los propietarios en posibles políticas de limpieza a seguir que mejoren la situación actual del monte.