Natalia y Andrea conquistan el trono de Brancal de la Ciutat

Con motivo del 197 aniversario de la inauguración del Museo del Prado, la gaiata 1 quiso brindar un homenaje a una de las pinacotecas más conspicuas y grandiosas del mundo. No en vano, el mismo día que el pasado sábado, pero de 1819, abría sus puertas el entonces conocido de forma discreta como Museo Real de Pinturas y, para celebrar esa singular efeméride, Brancal de la Ciutat pintó su propio cuadro para elevarse como uno de los sectores más ilustres que compondrán la paleta de colores de la próxima fiesta magdalenera.

Ante un Palau de la Festa lleno hasta la bandera, el colectivo de la plaza del País Valenciano y adyacentes se puso de gala para presenciar el bautizo del colectivo y, sobre todo, para encumbrar y rendir pleitesía a las dos bellas jóvenes que serán las máximas embajadoras brancaleras durante el próximo ejercicio fester. Esa honorable y bonita responsabilidad recayó en Natalia Palacio Bernad y Andrea Renau Telo, quienes recibieron la banda que las acreditó como las nuevas madrinas de la gaiata número 1.

Los viajes en el tiempo fueron el denominador común de la multitudinaria puesta de largo del sector. Con los populares personajes de la serie El Ministerio del Tiempo Alonso de Entrerríos y Amelia Folch como nexos temporales, la ceremonia retrotrajo al público al siglo XIX, trasladándolo a la ópera de París hasta acabar descubriendo finalmente el significado de lo que representa una gaiata: la luz de Castellón. Mientras los dos actores se perdían por el tiempo, bailes y danzas de diferentes estilos se sucedían en el escenario para amenizar a la expectante audiencia. Desde el ballet al ball pla, casi todos los géneros tuvieron cabida.

Sin embargo, pese a la elevada dosis de artes escénicas y espectáculo que aglutinó la presentación, el componente de tradición fue el más predominante. En ese sentido, las primeras chicas en romper el hielo y ocupar sus asientos fueron las dos máximas representantes de la gaiata durante todo este año. Marina Redó Fortanet y Lucía Madero Agost desfilaron por última vez como madrinas de Brancal de la Ciutat y recibieron una calurosa despedida por parte de sus más allegados. «Gracias por un año inolvidable», rezaba la pantalla del Palau para agradecer su labor.