El agua representa de media el 60% del peso corporal en una persona adulta. La distribución del agua va por compartimentos: 10% en órganos, 10% en sangre, 20% alrededor de las células y 60% en las células. Se podría decir que somos agua, y que se pierde constantemente, por eso es clave su reposición.

Las funciones que cumple el agua en nuestro organismo para asegurar un funcionamiento correcto son las siguientes: transporta y distribuye los nutrientes esenciales, elimina las toxinas que producen nuestros órganos, regula la temperatura corporal, colabora en el proceso digestivo, y actúa como lubricante de las articulaciones.

El agua es tan importante para nuestro cuerpo que una persona a una temperatura normal y con una vida relativamente sedentaria puede aguantar tan sólo entre tres y cinco días sin beber. Y digo tan sólo, porque el organismo de esa misma persona adulta podría aguantar hasta un mes sin ingerir alimentos.

Durante la práctica deportiva aumentan las necesidades hídricas. Una correcta reposición de agua y sales minerales es imprescindible para incrementar el rendimiento deportivo y prevenir lesiones. Un exceso de hidratación sin el aporte adecuado de minerales nos podría conducir a una hiponatremia, una concentración muy baja de sodio en sangre.

Para obtener un buen rendimiento deportivo se recomienda mantener un equilibrio hídrico constante y evitar la deshidratación: antes de la actividad deportiva 500 ml entre 1-2 horas previas, durante el ejercicio 100-200 ml cada 15-20 minutos con una concentración de sodio entre 0,5 y 0,7 gr/l, y al terminar cerca del 150% del peso perdido.

Consejos

Os doy unos consejos para una buena hidratación durante la práctica deportiva: lleva siempre una botella de agua y bebe a pequeños sorbos y regularmente; además, debes tener en cuenta que la sed es un síntoma tardío de deshidratación en nuestro organismo. No hay que esperar a tener sed, porque ésta no aparece hasta que se ha perdido un 1 o 2% del agua corporal, es decir cuando ya estamos deshidratados y el rendimiento ha comenzado a disminuir.

Hidrátate

Por otro lado, lo ideal es tomar el agua entre 10 y 15°C. Hidrátate, antes, durante y después del ejercicio, ya que mantenerse hidratados es una de las claves para el éxito deportivo y evitar cualquier tipo de lesión fruto de una mala nutrición deportiva, puesto que no solo los alimentos son fundamentales a la hora de entrenar y competir, si no que el agua es uno de los factores trascendentales.

*Nutricionista, entrenadora personal y deportista

belenagut@hotmail.com