Rubén Bueno, director técnico de Lokimica, empresa adjudicataria de los tratamientos contra los mosquitos en las zonas centro y sur de la provincia, asegura a este diario que las últimas lluvias y las suaves temperaturas mínimas que ahora comienzan a no bajar de los 10 u 11 grados, pueden propiciar la proliferación de la plaga, por lo que estos primeros y rápidos tratamientos «son fundamentales para ser efectivos». «Hemos detectado que estas precipitaciones pueden acelerar el nacimiento de las larvas y hay que atajarlo con el fin de que los tratamientos sean efectivos a corto y medio plazo, con la llegada del verano», continúa Bueno, quien detalla que lo que está pasando hoy en día en la provincia de Castellón con los mosquitos en esta época es habitual también en otras localidades de toda la franja litoral del Mediterráneo debido a la climatología actual.