La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, reclamó ayer la apertura de un debate en torno a la financiación local, así como una aportación estatal de al menos el 30% de los ingresos locales, además de la flexibilización de la regla del gasto. Marco aseguró que «el Gobierno de Rajoy ha actuado en contra del municipalismo», con decisiones como la aprobación de la Ley para la Reforma Local, que, dijo, «ha supuesto un ataque frontal a la autonomía local y a su capacidad de prestar servicios a la ciudadanía». La alcaldesa señaló que «los ayuntamientos han sido las administraciones públicas que han sufrido las consecuencias de las políticas de austeridad insolidarias y agresivas».

REFORMA DEL MODELO

Desde el punto de vista de la alcaldesa de la capital, es «necesaria una reforma del modelo de financiación», que pase porque «la participación de los tributos del Estado se sitúe en torno al 30% de los ingresos municipales, ya que en los últimos años ha decrecido la aportación». Otro aspecto sería la reforma del sistema tributario local. Por ejemplo, explicó Amparo Marco, «modificar o eliminar tributos ineficientes o con falta de seguridad jurídica, como es el caso de las plusvalías». Marco sugirió, además, la posibilidad de flexibilizar la regla de gasto, para que «no se penalice a los ayuntamientos que quieran dedicar más recursos a las políticas sociales».

SUPERÁVIT Y LIBERTAD

Por último, propuso que «se permita utilizar el superávit municipal con más libertad, no solo para amortizar deuda o para inversiones financieramente sostenibles». En definitiva, la alcaldesa de Castellón destacó la exigencia de abordar las reformas necesarias con el objetivo de dotar a los ayuntamientos de «las condiciones y capacidades políticas y económicas adecuadas que les permitan ofertar a la ciudadanía los servicios que la sociedad demanda».