El cierre de la residencia Lledó por reformas, tras las vacaciones de Navidad, dejará a la ciudad de Castelló sin ningún centro de gestión pública de asistencia a mayores. Los 14 usuarios serán trasladados a las dependencias que tiene la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas en Burriana. Y es que estos son los dos únicos centros de gestión totalmente pública de la provincia.

Un déficit que vienen denunciando diversos colectivos como la Plataforma en Defensa de la Ley de la Dependencia en Castellón. Desde la entidad han reclamado al Consell un programa similar al Pla Edificant, lanzado para construir centros educativos, dada la inexistencia de plazas públicas. La falta de este tipo de recursos provoca largas listas de espera entre los dependientes para acceder a estos servicios.

La reforma integral de Lledó, presupuestada en más de 1,5 millones de euros y con una duración de las obras aproximada de siete meses, fue anunciada hace cerca de tres años por la consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra. Un retraso que también acumula la futura residencia pública de la capital de la Plana, prometida por la consellera en reiteradas ocasiones. El proyecto está paralizado. Para construir esta instalación, el Ayuntamiento ofreció un solar de 3.816 metros cuadrados situado entre las calles Onda y Ribelles Comín, en el distrito sur de la ciudad.

En este sentido, el portavoz del equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Castelló, Rafa Simó, afirmó ayer que serán «reivindicativos con las administraciones que prestan un servicio a Castelló», al tiempo que reconoció que el consistorio todavía no ha cerrado la cesión de los terrenos.

iniciativa privada // Ante esta parálisis, es el sector privado el que está moviendo ficha dada la elevada demanda motivada por el envejecimiento de la población. Ahora hay tres proyectos en marcha. El Grupo Clece está inmerso en la puesta en marcha de una nueva residencia, con 104 plazas, que ocupará el actual solar situado en el número 11 de la avenida Barcelona, cerca del parque Ribalta. También en el antiguo convento de la Orden de los Carmelitas Descalzos, situado en la avenida Capuchinos, se habilitará una residencia para ancianos.

Más avanzado y a punto de abrir sus puertas está el centro de mayores situado en el PAI Lledó, frente al colegio Tombatossals. Es un proyecto del grupo Orpea, el segundo en número de camas en España, para 150 usuarios.

problema generalizado // Y es que la Conselleria tiene un verdadero problema en cuanto a plazas residenciales se refiere no solo en la capital, también en el interior. Ahora están en marcha los trámites para empezar a principios del próximo año las obras de una residencia pública y centro de día en Sant Mateu. Pero esta instalación será insuficiente para resolver el déficit asistencial en esta materia, especialmente, en las comarcas del interior, donde la población tiene más edad.