No corren tiempos en calma en el Ayuntamiento de Castelló. El acercamiento entre el PSPV y Ciudadanos para la negociación del presupuesto del 2021 y la reivindicación conjunta sobre la construcción del conservatorio en un solar diferente al ubicado junto a la Ciudad de la Justicia ha abierto la caja de los truenos en el consistorio de la Plana y, principalmente, en el seno de Compromís y Podem, socios de gobierno de los socialistas.

Una fractura que ha aprovechado el portavoz de Cs, Alejandro Marín-Buck, para marcar territorio y afirmar que su partido valoraría «entrar en el gobierno de Marco o ser su socio preferente» en el caso de que la alcaldesa les ofrezca esa posibilidad.

«Ciudadanos está en el Ayuntamiento con vocación de gobernar pero los gobiernos con partidos populistas y nacionalistas, como Podem o Compromís, no nos gustan y preferimos un gobierno en solitario del PSPV o con nosotros porque los votos de mayoría salen. Diez concejales socialistas y cuatro de Ciudadanos dan 14, mayoría absoluta», dijo Marín-Buck.

Este concretó que su aproximación con el PSPV es por posicionamientos razonables (presupuesto y solar para el conservatorio) y recordó que el Acord de Fadrell «nació fracturado en este mandato».

A este respecto, el grupo municipal del PSPV destacó que es el partido al que la ciudadanía «escogió mayoritariamente para gobernar en Castelló y tenemos la capacidad para dialogar y consensuar con unos y con otros».

«Para el PSPV, el interés de la ciudad siempre estará por encima de cualquier otra consideración», dijeron las mismas fuentes.

Los socios / Mientras que Compromís defiende las políticas de izquierdas «como las que de verdad están funcionando, las que están dando soluciones, las que optan por reforzar los recursos educativos, sanitarios y de servicios públicos frene a las políticas de recortes y de privatizaciones», el portavoz municipal de Podem ve con «preocupación» este acercamiento entre ambos partidos. Para el podemita, el PSPV «no ha tenido la cortesía de explicar a sus socios lo que negociaba y eso no nos ha gustado porque es comportamiento deshonesto y desleal».

ENCONTRONAZOS

Una aproximación entre el equipo de Amparo Marco y el partido naranja que supondría otra piedra en el camino del Acord de Fadrell después de que el tripartito haya protagonizado algunos encontronazos durante este mandato. Hay que recordar, en este sentido, el voto a favor de Compromís -con PP, Cs y Vox-para que se convocara la Asamblea de Fiestas en contra de lo que opinaban sus compañeros de viaje en el consistorio, o el sí de los nacionalistas (junto a Cs), de que el Ayuntamiento se adheriera al Código Ético de la FVMP en detrimento del de la FEMP que defendían los socialistas. En cuanto a Podem, este no dio su ok a los presupuestos del 2020 hasta que no se modificó la RPT para introducir, entre otros cambios, una plaza de ingeniero agrónomo.

Estas situaciones han obligado a un Reacord de Fadrell y a la creación de una comisión de seguimiento para derimir cuestiones internas y limar asperezas.

¿RUPTURA?

En cuanto a la posibilidad de una ruptura entre los partidos del Acord, desde la formación nacionalista dijeron que «si el PSPV quiere gobernar con la derecha, esa decisión tiene que tomarla exclusivamente el PSPV». Navarro mostró su confianza en «terminar la legislatura como socios de gobierno del PSPV porque la hoja de ruta de este sigue siendo la mayoría del Acord.