El presidente del Comité de representantes de personas con discapacidad (Cermi), Luis Vañó, ha pedido un fondo de rescate de emergencia de 4,5 millones de euros para el sector de la discapacidad que se destinaría a «detener el naufragio» de las estructuras de apoyo cívicas. En su comparecencia en la comisión parlamentaria para la reconstrucción por la pandemia por coronavirus en Les Corts, Vañó explicó que este fondo se insertaría en otro mayor de 23 millones para todo el sector de acción social.

Entre las acciones que reclama está la reducción de trámites y documentación acreditativa de la discapacidad para agilizar el cobro de ayudas y la simplificación del certificado del grado correspondiente, que en muchos casos es «la llave» de acceso a prestaciones sociales. Además, pidió un plan de choque para aminorar las listas de espera en este asunto y en dependencia.