Arranca la semana y el Villarreal CF solo piensa en el estreno en LaLiga 2020/21 y en su primer encuentro contra el Huesca. El equipo que dirige Unai Emery ha cerrado una temporada bastante irregular, en la que ha encajado tres derrotas en los cinco amistosos disputados. Pero, más allá de los resultados en sí, el técnico vasco va a tener que trabajar a fondo con su plantel para intentar mejorar en el aspecto defensivo.
Al Submarino le ha costado no encajar goles en los encuentros de preparación disputados este verano y, de hecho, ha recibido goles en cuatro de ellos, las derrotas contra el Tenerife (2-3), Valencia (1-2) y Levante (1-2). Además, el equipo de Emery se adelantó en todos ellos pero sus respectivos rivales acabaron remontando y esa es otra circunstancia que el preparador de Hondarribia quiere evitar por todos los medios de cara al inminente arranque liguero.
En los otros dos, el equipo de la Plana Baixa salió victorioso y se impuso al Cartagena (2-1) y a la Real Sociedad (2-0).
En total, el equipo villarrealense ha marcado diez goles en cinco partidos, lo que supone una media alta de goles, pero, por el contrario, ha recibido un total de ocho goles, lo que supone también un alto registro y se nota que Emery y su cuerpo técnico todavía están buscando el equilibrio entre su nueva plantilla.
De hecho, el preparador del Submarino no ha podido trabajar con todos sus futbolistas, ya que la plantilla todavía no está completa y han pasado factura tanto las molestias físicas como los compromisos internacionales entre los suyos, debilitando aún más, si cabe, la defensa amarilla.
Esta semana será clave para comenzar a trabajar en los aspectos en los que más flojea el equipo y preparar a conciencia los primeros compromisos ligueros contra el Huesca y el Eibar. Tiempo hay, pero las sensaciones que se han adquirido durante la pretemporada han de quedar ahí y el Villarreal ha de mejorar en la parcela defensiva para empezar con buen pie una temporada que se presenta ilusionante. H
