Humi Palau Peris, nacida en la Pobla Tornesa en 1968, es piloto de enduro y cross-country. Con más de 15 años compitiendo a escala autonómica, nacional e internacional, su brillante palmarés la convierte en la máxima exponente del motociclismo femenino provincial de los últimos años. De hecho, atesora 4 campeonatos de la Comunitat Valenciana de enduro (2014, 2015, 2016 y 2018), 2 campeonatos de la Comunitat Valenciana de cross-country (2014 y 2016), 3 campeonatos de España de enduro (2007, 2008 y 2015), campeonato de España de cross-country (2018), medalla en los ISDE 2016 y quinta clasificada en el campeonato del mundo de enduro 2018.

Aunque a día de hoy está más que consolidada como referente dentro de este mundo, su relación con las motos empezó relativamente tarde. «Lo habitual es empezar de bien pequeña, pero yo no pude hacerlo», asegura. Debido a lo complicado que resulta adquirir una motocicleta de competición siendo joven, la castellonense no se inició en el enduro hasta que pudo disponer de una. Sin embargo, desde el momento en que la tuvo, surgió el amor a primera vista, llegando a convertirse en «algo más que un deporte» para ella. «Todos los pilotos somos una familia, en cada competición se crea un clima de unión muy especial», afirma.

A lo largo del año, Palau compite en una gran cantidad de pruebas: «Entre el campeonato de España de enduro y cross-country, los de la Comunitat Valenciana y alguna competición más, puedo llegar a participar en unas 25, aproximadamente».

Los duros entrenamientos

Para poder hacer frente a esta elevada cantidad de carreras y mostrar un buen nivel, es necesario entrenar el pilotaje y, sobre todo, la forma física. «El entrenamiento físico es esencial. En este sentido a mí me ayuda mucho mi trabajo. Doy clases de pilates y spinning, donde aprovecho para mejorar tanto la fuerza como la resistencia de mi cuerpo», argumenta.

Los peligros de ser piloto

En cada una de estas competiciones, los participantes están expuestos a sufrir caídas o accidentes. El peligro es algo que está latente en todo momento. No obstante, la piloto de la Pobla manifiesta no haber sentido miedo: «Es cierto que se trata de una disciplina que requiere estar concentrada al máximo en todo momento para ser consciente de cada situación y saber qué se lleva entre manos, pero nunca he tenido miedo».

Respecto a lo que opinan sus familiares y amigos sobre que se dedique a practicar un deporte de riesgo, Humi revela: «En mi casa somos todos endureros. Está claro que una actividad de esta peligrosidad siempre preocupa a los más cercanos, pero cuando lo vives desde dentro y lo conoces todo realmente bien, la verdad es que no resulta ser tanto como parece en un principio».

El próximo objetivo

Pese a que ya ha conseguido ganar prácticamente todos los títulos posibles a nivel nacional y autonómico (11), su sueño es poder repetir la experiencia de participar en los Seis Días Internacionales de Enduro (ISDE). «Fue increíble, estaría bien poderlo repetir», declara.