Regresa la liga de fútbol sala en Primera División después del parón por los compromisos de selecciones, y lo hace con la disputa de la jornada 21 en lugar de la 20, que se jugará entre el próximo martes y miércoles, debido un error en la confección del calendario. El Servigroup Peñíscola FS pasa página de la Copa del Rey, en la que cayó eliminado en Sevilla frente al Betis el miércoles pasado, para centrarse en la competición doméstica. La escuadra del Baix Maestrat no abandona Andalucía y esta tarde jugará en Córdoba su compromiso de la competición de la regularidad a partir de las 19.00 horas.

Undécimo con 21 puntos, el Peñíscola cuenta con una ventaja de diez con los puestos de descenso. Aunque aún queda mucho por jugarse, lograr hoy la victoria supondría un paso muy importante para acercarse a los 30 puntos que su técnico, Juanlu Alonso, considera que serán necesarios para salvarse.

La cita de hoy, además, tiene la importancia de que el rival también pelea por la permanencia. El Córdoba es 13º con 15 puntos y superarlo también implicaría coger ventaja con otro de los equipos que vienen por detrás, apretando fuerte por la salvación.

PANIAGUA DUDA/ Cara al encuentro de esta tarde, Juanlu Alonso tiene algunas dudas. Y es que Panigua tuvo que ser evacuado, inmovilizado en camilla con collarín, en el partido de Copa después de una caída luchando por el balón. Por fortuna, todo quedó en un susto, aunque su presencia ante el Córdoba es duda. Si definitivamente no entra en la convocatoria, lo hará en su lugar el joven Carles Saladié, incorporado al equipo en el mercado de invierno junto con Iván Rumbo.

El Peñíscola, que quedó concentrado en tierras andaluzas desde el pasado jueves, concretamente en Baeza, recibió en el entrenamiento de ayer la visita de los escolares de la ciudad, así como la del concejal de Deportes del municipio, al que hicieron entrega de una camiseta firmada por todo el equipo provincial.