El Mini Submarino se impuso al Formentera con justicia. No en vano los amarillos superaron a los isleños de cabo a rabo en un encuentro en el que demostraron toda su calidad en ataque.

Los de Miguel Álvarez dominaron desde el primer tramo del partido con su habitual juego de posesión y apertura a las bandas, que se encargaban de ensanchar unos laterales muy ofensivos. Además, Leo Suárez y Chuca entraron constantemente en la circulación del esférico en las jugadas de ataque haciendo que el Formentera estirara sus líneas.

Conforme pasaron los minutos, Raba e Imanol se hicieron amos y señores del centro del campo y volcaron su juego en ataque, sobre todo el cántabro Dani Raba. Llegado el minuto 24, Chuca volvió a poner a prueba el buen hacer del guardameta visitante con un empalme que el portero desvió. El mismo interior amarillo reiteró más tarde con un disparo desviado en el minuto 36.

Cercanos ya al descanso, los locales subieron un poco su intensidad en ataque. Esta vez fue Leo Suárez el que estrelló un balón en la cepa del palo tras un libre directo. Cuando parecía que se llegaba al descanso con tablas volvió a aparecer Chuca. Ya en el minuto 45, el filial amarillo trenzó un contraataque colectivo que acabó recibiendo Chuca en el vértice izquierdo del área visitante, recortó hacia adentro la embestida de un defensa y colocó con calidad el balón en la escuadra.

Con la reanudación del partido el Formentera salió un poco más intenso, sin embargo era el Villarreal B el que daba más sensación de peligro. Parecía más cerca del gol el cuadro local, pero el futbol trae sorpresas. Fuoli salió del área a despejar un balón y terminó por hacerse un lío alejándose aún más de su portería. Juan Antonio lo aprovechó para marcar desde el centro del campo.

Reacción meteórica // Pese al empate, el segundo equipo del Villarreal siguió a lo suyo y a través del buen juego dominó la adversidad. Solo cinco minutos después del empate, Leo Suárez colgó un balón al área desde la banda derecha que Imanol, libre de marca, remató en el primer palo. El cuero, tras rozar levemente en un defensa, se coló en la portería para devolver la ventaja.

Dos minutos más tarde, en el 61, fue el propio Leo Suárez el que culminó una gran jugada de Raba para poner el 3-1 con un disparo colocado al poste. El Villarreal B dominó y buscó portería. Sin embargo, en pleno tiempo de prolongación, en otro despiste defensivo local, el central visitante, Quico, remató de cabeza con comodidad un centro colgado al área en un saque de falta desde la línea medular.

El filial cerró su ciclo de dos partidos seguidos en casa con un balance de seis puntos y con su imbatibilidad intacta. La próxima cita, en Mallorca ante el líder este domingo (12.00 horas).