El Gobierno de Pedro Sánchez es experto en crear cortinas de humo y polémicas donde no las había para evitar que se hable de lo verdaderamente importante como la imposición lingüística y la falta de libertades educativas que vivimos en la Comunitat Valenciana gracias al amparo imperturbable de la ministra Celaá.
Pero no nos callarán. En Ciudadanos vamos a seguir siendo la voz de las familias que sienten como su propio Gobierno les obliga a hablar en una lengua concreta o acudir a un centro determinado, aunque ellos no lo deseen. Un Gobierno que en lugar de garantizar sus derechos, los viola sistemáticamente por sectarismo puro y duro. Un Gobierno que no busca la calidad educativa y la excelencia, sino la ideologización de las aulas.
Por eso, con el objetivo de defender a todos los valencianos por igual, hemos pedido para ellos protección en Bruselas. Les facilitaremos a familias y profesores afectados por la imposición lingüística que puedan denunciar su situación ante el Parlamento, la Comisión y el Consejo. Porque en Ciudadanos tenemos claro que ante todo y ante todos, defenderemos siempre la libertad y la igualdad.
La educación no puede estar a merced de unos o de otros, debe estar al servicio de los ciudadanos sin excepción. Ya basta de utilizarla como arma arrojadiza o para el adoctrinamiento. Nuestra única obligación como representantes públicos es llegar a grandes pactos y consensos que promuevan una educación en valores democráticos, diversa, plural, igualitaria y libre.
*Portavoz provincial de Cs
