El dispositivo desplegado para extinguir el incendio declarado ayer en Navarra, entre Tafalla y Pueyo, estaba previsto que se mantuviera durante toda la noche, a excepción de los medios aéreos, aunque se logre controlar el fuego, que ha afectado ya a más de 2.000 hectáreas de vegetación, sin llegar a núcleos de población. La Policía Foral trabaja con la hipótesis de que la causa del fuego, cuyo humo ha llegado hasta Pamplona, ha podido ser una colilla arrojada desde un vehículo que circulaba por la autopista AP-15, a la altura del kilómetro 54,5, en el término de Tafalla.

Por el momento, el fuego no ha afectado a la Autopista de Navarra (AP-15), ni a la carretera que une Pamplona con Tudela (N-121), ni al tráfico ferroviario entre Pamplona y Zaragoza, que se vio interrumpido durante 30 minutos a primera hora la tarde. La red secundaria se cerró para facilitar las tareas de extinción.

El Gobierno de Navarra informó que el dispositivo, al que se incorporaron los primeros efectivos de la Unidad Militar de Emergencias, que moviliza 18 vehículos y medio centenar de personas, permanecería desplegado porque en el amplio perímetro afectado por las llamas “hay una gran dispersión de focos que tendrán que ser refrescados”.

En cualquier caso, señaló que, a pesar de la elevada dimensión del perímetro, se prevé que la superficie realmente quemada sea menor porque es posible que el fuego haya saltado por encima de zonas de depresión dado lo irregular del terreno y por la rapidez con la que avanzaban las llamas, 10 kilómetros en tres horas. A las 20 horas trabajaban en el dispositivo de extinción ocho medios aéreos y todas las dotaciones de bomberos del Parque Central y de Tafalla, Estella, Lodosa y Peralta, así como una del de Sangüesa.

Eran en total 18 dotaciones de bomberos, reforzados por tres helicópteros, tres avionetas (una con base en Noáin y dos en Agoncillo, La Rioja) y dos hidroaviones (con base en Zaragoza). H