Nunca fue más necesaria la música de un grupo como éste, desvergonzado y con más ganas de cachondeo que nadie, con las narices para juntar Raffaella Carrá con Cabaret Voltaire en el mismo tema. Novio Caballo se erige como los nuevos abanderados del pop-punk. Los hijos bastardos de Paco Clavel y los Sex Pistols, todo un cóctel equino.

Son los autores de Jesús se negro , infra hit indie incluido en su debut homónimo lleno de mala leche, provocación, electrónica y punk . Lo presentaron en varios conciertos apoteósicos como el FIB o el Orgullo Madrileño. Su último trabajo, Chicas en chándal es un EP con esta pieza como elemento unificador, que reduce a toda la humanidad de seis a un grado de separación, de Chávez a Chenoa. Contiene cuatro canciones que conviven como vecinos en una comunidad ideada por Álex de la Iglesia, parece que no tengan nada en común, pero guardan todos algún secreto oscuro que les une.