A FONDO

El interior tiene futuro

Desde el PPCV proponemos beneficios fiscales para estas zonas rurales, rebajando impuestos

Carlos Mazón

Carlos Mazón

El interior de Castellón no puede seguir siendo el gran olvidado. El 80% está afectado por el éxodo rural, con 54 pueblos en riesgo de despoblación por debajo de los 300 habitantes. Poblaciones como Matet en el Alto Palancia, Castell de Cabres con veinte habitantes en el Baix Maestrat o Vallibona en Els Ports sufren desde hace años el lastre del crecimiento demográfico negativo. Pero la despoblación no solo es un reto demográfico. Se pueden adoptar medidas para fomentar un futuro esperanzador.

Desde el PPCV proponemos beneficios fiscales para estas zonas rurales, como rebajar impuestos a un tipo súper reducido en la compra de viviendas o la cuota cero para los nuevos autónomos de esos municipios. También proponemos asegurar la movilidad con el transporte público, de redes que permitan trabajar desde casa, de asistencia sanitaria accesible y de calidad, pero también de incentivos empresariales y el impulso de actividades como la ganadería y la agricultura.

La capacidad de crecimiento del interior de la provincia de Castellón es tremenda. La clave está en saber generar esas oportunidades. Pero el Consell de Puig tan solo se ha dedicado en ocho años a aprobar una ley de medidas contra el despoblamiento en Les Corts sin concretar nada, una especie de listado de buenas intenciones, simple papel mojado, cuando es urgente actuar.

Puig no solo no ha hecho nada por el medio rural, sino que el listado de iniciativas de su gobierno está lleno de palos en la rueda del crecimiento de estas comarcas: recortes sanitarios, falta de ambulancias, abandono de los montes, sin cobertura de transportes, sin cajeros automáticos, falta de nuevas tecnologías, discriminación en el reparto de fondos europeos contra la despoblación, excesiva burocracia que ralentiza inversiones empresariales (principalmente de energías renovables), más carga impositiva con Sánchez y Puig hasta niveles asfixiantes, continuas trabas administrativas a los bous al carrer que aportan riqueza a las ganaderías del interior; falta de llegada de las subvenciones presupuestadas que nunca se ejecutan…

Creación de empleo

La solución está en mejorar los servicios, las infraestructuras y, sobre todo, potenciar la economía local, favoreciendo la creación de empleo y realizando un esfuerzo desde la administración para que cada vez más empresas decidan levantar allí la persiana. Hay que apostar por la creación de empresas en zonas rurales aprovechando las ventajas que ofrecen miles de hectáreas de suelo disponible para atraer inversiones. No basta con grandes proclamas sentimentales y el anuncio de ayudas que nunca llegan, sino que hay que fomentar la economía real y la creación de empresas para hacer atractiva esta opción de vida.

Pero el tándem Sánchez-Puig viene haciendo precisamente todo lo contrario. Es tristísimo que, por ejemplo, la línea ferroviaria Valencia-Zaragoza que vertebra las comarcas del Mijares y el Palancia, vea amenazada su continuidad por la falta de mantenimiento y el recorte de frecuencias diarias a la mitad, de seis a tres. Este abandono recuerda lo sucedido con otra línea interior, la de Valencia-Cuenca-Madrid, que al final ha cerrado de manera definitiva.

O la decisión de Transportes de no ejecutar la ampliación de la autovía CV-10 entre Vilanova y la Jana, pese a la saturación de la autopista y a las promesas de la ministra Raquel Sánchez. Con el gobierno popular de Rajoy se destinaron 434 millones de euros para la ejecución de la obra y ahora el PSOE entierra las expectativas de futuro para el interior norte y el Maestrat.

Pero no hay que perder la esperanza. Es momento de sonreír porque ya se van y desde el PPCV sabemos qué hay que hacer para revitalizar nuestras comarcas. Nosotros sí creemos en las posibilidades y el futuro del interior de la provincia de Castellón.

Presidente PPCV

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