CON LAS OREJAS TIESAS

Ser más cautos

Juan Lozoya

Juan Lozoya

Llevo ya varios meses alertando de que en la provincia de Castellón, al igual que está pasando en el resto de España, hemos entrado en una espiral del consumo a prueba de bombas y a prueba de subidas de precios, pero en contra de toda lógica y en contra de nuestras cuentas corrientes, que cada vez están más mermadas a costa de mantener nuestro nivel de gastos por encima de nuestras posibilidades de ingresos. Pero ya no es algo de lo que estemos alertando ya muchas personas, es que el último informe del Banco de España ha certificado que los ahorros de las empresas y familias castellonenses han estado cayendo este año de forma significativa: menos de 500 millones de euros en los bancos respecto a septiembre de 2022.

Está claro que los depósitos bancarios no compensan en estos momentos respecto al sobrecoste que ha supuesto solicitar créditos o hipotecas y se hay movido el dinero hacia otros productos financieros. Pero también es cierto, desgraciadamente, que los castellonenses estamos estirando más el brazo que la manga en un momento económico más que complicado.

Restaurantes llenos

Y lo cierto es que estos días de Navidad parece un chiste de mal gusto hablar de complicaciones y crisis económica, cuando los restaurantes están llenos a rebosar y en los mercados están dando salida a todos los productos, incluidos los más caros de la cesta de la compra para nuestras comilonas de Navidad y las de Nochevieja y Año Nuevo que se nos vienen encima. Pero, al igual que la UE nos ha vuelto a dar a España un toque de atención este mes para que rebajemos el nivel de déficit y de endeudamiento desde el Gobierno, nosotros deberíamos tener las orejas tiesas y empezar a tomar medidas para que no venga un tsunami de liquidez como el de hace 15 años, que se llevó muchas empresas y familias por delante. Y es que mientras que el Gobierno no dé un poco de aire a un sector tan importante para nosotros como el cerámico, en la provincia tenemos argumentos en contra que nos obligan a ser más cautos.

Periodista